Así lo aseguró el portavoz del Ministerio chino de Comercio, Shen Danyang, en una rueda de prensa en Pekín, en la que detalló las causas que hacen prever este cambio.
Pekín. La inversión china anual en el extranjero será superior a la que atraiga la potencia asiática en 2015, después de que los inversores se hayan mostrado recientemente más precavidos ante los signos de ralentización de la segunda economía mundial.
Así lo aseguró el portavoz del Ministerio chino de Comercio, Shen Danyang, en una rueda de prensa en Pekín, en la que detalló las causas que hacen prever este cambio.
Shen afirmó que las tornas se invertirán el próximo año debido a varias circunstancias: la primera, dijo, que China es el segundo país con mayor PIB del mundo, por lo que tiene "capacidad" para invertir y un fondo destinado a ello de US$4 billones.
Además, destacó que la potencia asiática impulsa actualmente medidas favorables para que a sus compañías les resulte más fácil invertir en el extranjero, y además en sectores variados, lejos de la consideración habitual de que a China le interesa, sobre todo, el energético (23% de sus inversiones el pasado año).
En ese sentido, enfatizó que el país diversificará sus negocios, y, por ejemplo, vaticinó que las inversiones en Europa podrían aumentar hasta un 200% en los próximos años, ya que todavía suponen un exiguo 5,5% del total.
Acerca de Latinoamérica o África, el portavoz hizo una consideración similar, y destacó el compromiso de la segunda economía mundial con proyectos en esas regiones.
Estas declaraciones se produjeron poco después de que ese Ministerio publicara hoy que la inversión directa extranjera en China, sin contar lo que procede del sector financiero, alcanzó los US$7.200 millones en agosto, lo que supone una caída del 14% interanual.
Esta bajada se produce después de la caída registrada en julio -del 17%-, el nivel más bajo contabilizado en casi cinco años, recordó el martes la agencia oficial Xinhua.
En total, en los primeros ocho meses del año, las inversiones foráneas sumaron US$78.340 millones, un 1,8% menos que en el mismo periodo del año anterior.
Por el contrario, la inversión de China en el exterior por parte de empresas no financieras creció un 112,1% hasta los US$12.620 millones en agosto, mientras las exportaciones del país aumentaron un 9,4% interanual ese mismo mes.
Las inversiones directas de las empresas chinas fuera del país superaron los US$100.000 millones durante 2013, según cifras oficiales divulgadas este martes.
En 2013, el total del inversiones directas chinas en el exterior alcanzó los US$108.000 millones, un 22,8% más que en 2012, según un informe publicado la pasada semana por el propio Ministerio de Comercio, la Oficina Nacional de Estadísticas y la Administración Estatal de Moneda Extranjera.
Pese a todo, Shen se mostró hoy convencido de que China crece a un ritmo "estable" y que resulta "exagerado hablar sobre un aterrizaje" de su economía, apenas una semana después de que el primer ministro del país, Li Keqiang, afirmara en un discurso que el país cumplirá este año su objetivo de crecimiento del 7,5%.
Por otro lado, restó importancia a la supuesta reticencia de inversores extranjeros a hacer negocios con China tras la puesta en marcha de investigaciones antimonopolio contra ciertas compañías foráneas, entre ellas Microsoft.
"De los 330 casos bajo investigación, sólo 33 son compañías extranjeras", subrayó, a la vez que consideró que China "sólo trata de equilibrar el tablero de juego de los negocios".