Algunos economistas afirman que los recientes déficits presupuestarios en Brasil dejan al país bajo un predominio fiscal, en el cual las tasas de interés pierden efectividad como herramienta para desacelerar a la inflación.
La economía brasileña no está bajo dominio fiscal, aunque la demora en la aprobación de medidas clave para apuntalar las finanzas del Gobierno han impulsado las expectativas inflacionarias, dijo este jueves el presidente del Banco Central, Alexandre Tombini.
Algunos economistas afirman que los recientes déficits presupuestarios en Brasil dejan al país bajo un predominio fiscal, en el cual las tasas de interés pierden efectividad como herramienta para desacelerar a la inflación.
Tombini dijo que los actuales desequilibrios fiscales son "temporales" y que el Banco Central seguirá trabajando para llevar a la inflación de vuelta al objetivo oficial de 4,5% en 2017.
El dominio fiscal se define como un período en el cual la posición fiscal de la economía "fija" en la práctica un objetivo que la política monetaria debe seguir.