El presidente colombiano, de visita en Londres para promover el comercio y la inversión en el tercer país más poblado de América Latina, dijo que su mayor preocupación era "que los países industrializados no sean capaces de adoptar las decisiones correctas y mostrarle al mundo que pueden solucionar su crisis".
Londres. Europa y Estados Unidos deben tomar ahora la misma medicina para recortar deuda que recetaron hace varios años a América Latina, o corren el riesgo de causar daños a la economía mundial, dijo el lunes en una entrevista a Reuters el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos.
Santos, de visita en Londres para promover el comercio y la inversión en el tercer país más poblado de América Latina, dijo que su mayor preocupación era "que los países industrializados no sean capaces de adoptar las decisiones correctas y mostrarle al mundo que pueden solucionar su crisis".
Cuando se le preguntó cuáles eran esas decisiones, Santos dijo: "Las mismas decisiones que esos mismos países nos pidieron que tomáramos en Latinoamérica hace varios años. Exactamente las mismas".
Hablando en momentos en que los mercados globales de acciones caían de nuevo por las preocupaciones sobre las crisis de deuda en Estados Unidos y Europa, Santos advirtió a los líderes europeos: "Ahora el mundo ha cambiado. Ahora nosotros estamos diciendo, 'pongan orden en sus casas porque el desorden nos está afectando'".
América Latina, y Colombia en particular, se han mostrado hasta ahora relativamente bien aislados de la crisis de la zona euro debido a sus robustos sistemas financieros, un bajo nivel de deuda, alta calidad de activos bancarios y baja inflación, dijo Santos.
"Estamos bien preparados pero uno nunca puede ser completamente inmune a situaciones como estas", agregó.
Colombia, que este año podría superar a Venezuela como la cuarta mayor economía de América Latina, marcha en el camino de la recuperación luego de la crisis financiera global 2007-2009.
Buenas perspectivas. Santos dijo que su país crecería más del 5,5% este año y que no sería golpeado en el 2011 por el contagio de Europa, aunque una recesión en el mundo industrializado el año próximo sería una historia diferente.
En comentarios que hizo más temprano del lunes durante una cumbre inversionista en Londres, el presidente dijo que el crecimiento de Colombia era sostenible porque "no estamos creando burbujas, no estamos sobrecalentando la economía".
El Banco Central de Colombia "tiene espacio para bajar las tasas" en caso de una recesión global, pero esto dependería de la inflación doméstica, dijo.
El crecimiento vendría de la infraestructura, construcción, agroindustria, minería, petróleo e innovación, agregó. La industria clave del café colombiano aumentaría la producción, ya que se han generado nuevas y jóvenes cosechas, más resistentes a las enfermedades.
Usando su condición como miembro del grupo CIVETS -un acrónimo acuñado por la revista The Economist para un grupo de siete países de economías emergentes de rápido crecimiento- Santos también espera tentar a las compañías europeas que buscan expandir sus mercados.
"Si yo fuera...". "Si yo fuera un empresario español y tuviera capacidad disponible (...) para mí lo más interesante sería ir a Colombia, donde se necesita esta capacidad, e invertiría ahí", dijo.
Una mejor seguridad es parte importante de la promoción para las inversiones que Santos destaca en sus giras internacionales.
Fuerzas del ejército ubicaron y mataron a Alfonso Cano, el líder de la principal guerrilla colombiana, las FARC, el 4 de noviembre, en el último de una serie de golpes a los rebeldes que hace algún tiempo controlaban grandes segmentos del territorio colombiano.
Sin diferencias. El presidente dijo que cree que el nuevo líder de las FARC, Timoleón Jiménez, no difiere de su antecesor y reiteró un llamado que hizo en agosto para que los rebeldes depongan las armas y comiencen a negociar con el Gobierno.
"No es imposible" que Jiménez, conocido con el alias de Timochenko, pueda seguir el ejemplo del nuevo alcalde electo de Bogotá y ganar algún día elecciones públicas si decide negociar y solucionar sus problemas legales, dijo Santos.
Los residentes en la capital colombiana de Bogotá, una ciudad de ocho millones de habitantes, eligieron a Gustavo Petro, un ex guerrillero del desaparecido grupo M-19, como nuevo alcalde de la ciudad el mes pasado tras decidir ignorar su pasado guerrillero.
"Si uno quiere realmente iniciar negociaciones y deponer las armas, miren lo que sucedió en las elecciones, un ex guerrillero es el alcalde de Bogotá", dijo Santos.
Consciente de la importancia del comercio bilateral y de la seguridad, Santos ha promovido políticas más conciliatorias hacia la vecina Venezuela que el ex presidente Alvaro Uribe,
Cuando se le preguntó sobre información de inteligencia que ubica a Timochenko en Venezuela, el presidente colombiano dijo que no vacilaría en pedir ayuda a Caracas si ese fuera el caso.
"Si tuviera pruebas de que él (Timochenko) está en Venezuela y dónde (se ubicaría), inmediatamente le pediría al presidente (Hugo) Chávez, que ya me ha ofrecido que si sabemos dónde está, él intervendría de inmediato", aseguró.
Aunque Santos dijo que las FARC han sido derrotadas políticamente, fue cauto en pronosticar un fin a la campaña militar desatada por la guerrilla más antigua en Latinoamérica.
"Han estado activos por 47 años y tienen una geografía ideal con selvas y montañas", dijo Santos. "Si insisten en permanecer como están, estarán cada vez más débiles, más distantes. Con menos capacidad de atacar. Lentamente desaparecerán", agregó.