“Aquí no se genera ninguna información respecto a las compras que cada uno realiza. No se registra qué se compró, no hay información del consumidor", dijo Martín Vallcorba, asesor del Ministerio de Economía y Finanzas.
El asesor del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), Martín Vallcorba, insistió este martes en entrevista con El Observador TV que la ley de inclusión financiera, que entró en vigencia el pasado 1° de agosto, no se trata de un “gran hermano” electrónico, en el que el Estado recibe información detallada de los ciudadanos.
“Aquí no se genera ninguna información respecto a las compras que cada uno realiza. No se registra qué se compró, no hay información del consumidor. La única información que se obtiene es que hay un comercio que vendió, que cobró IVA y que está obligado a pagar a la DGI. Quien debería estar preocupado es el comercio que opera en la informalidad. El que no cumple con las obligaciones. Me resulta extraño que quienes reclaman mayores luchas contra la informalidad, se critique una ley que regula la actividad de los comercios. No hay ningún gran hermano, ninguna intromisión en la privacidad de nadie”, aseguró el economista que ha llevado adelante la campaña de la nueva legislación.
Vallcorba indicó que aún no tienen datos precisos sobre el uso de los medios electrónicos de pago en estos primeros cinco días de la ley, pero señaló que “la sensación” de los comerciantes y consumidores es que ha habido un “cambio notorio en cuanto a los hábitos de pago”, en que antes el uso de la tarjeta de débito era muy poco utilizada. “Hemos tenido un crecimiento muy grande a nivel de todos los comercios”, dijo el asesor del MEF.
Hasta antes de la flamante ley, especificó, el 85% de las compras se hacían con efectivo o cheque; el 10% con tarjeta de crédito; el 4% con débito automático; y solo 1% con tarjeta de débito. “En otros países como Argentina o Brasil es del 20% o 25%”, explicó y añadió que aspiran a alcanzar ese porcentaje en el país “de aquí a dos años”.
Vallcorba aprovechó el espacio en El Observador TV para explicar algunos detalles de la ley de inclusión financiera: se prevé rebaja de dos puntos adicionales de IVA (serían cuatro puntos en el caso) en los pagos con tarjeta débito y dinero electrónico, o instrumentos análogos como débitos automáticos y los pagos online en los dos primeros años de la modalidad, para comprar menores a $ 11.500. En el segundo año, el beneficio será de un punto de adicional. En el caso de la tarjeta de crédito habrá una rebaja transitoria de dos puntos el primer año y un punto del IVA el segundo. También para compras menores a $ 11.500.
El asesor del MEF afirmó que el énfasis puesto sobre la tarjeta de débito se basa en que se trata del propio dinero que cada cual obtiene y que no es financiación. “Hay una diferencia importante en el uso. La tarjeta de débito no implica financiamiento. Es el dinero que tengo de modo electrónico. Uso el dinero que tengo. La tarjeta de crédito me permite pagar sin tener el dinero y por lo tanto es una compra financiada. Quisimos estimular la tarjeta de débito porque permite sustituir el efectivo. Por eso se puso foco en ese instrumento”, dijo.
También especificó que la rebaja del IVA no cabe en aquellas compras que no están gravadas por el impuesto, como cargar nafta o pagar una entrada en el cine. En tanto, con los alimentos, por ahora, se impuso un régimen especial.
“En el caso de los productos alimenticios, se estableció un régimen especial durante el primer año. Es un régimen ficto que no devuelve sobre la base del IVA, devuelve como si todos los productos estuvieron a la tasa de 22%. Si compramos leche fresca, que no tiene IVA, igual nos beneficiamos. Esto sucede porque hay muchos almacenes, pequeños comercios o kioskos que no tienen una caja inteligente que les permita calcular el IVA exacto”. Vallcorba indicó que durante este año se brindarán “facilidades” a los comercios para que puedan incorporar esas cajas inteligentes.