"A pesar de nuestra incapacidad para estrechar las importantes diferencias del comité, nosotros ponemos fin a este proceso (...)", dijeron representantes de ambas coaliciones.
Washington. Los legisladores de Estados Unidos abandonaron este lunes sus esfuerzos por controlar la creciente deuda del país, en una señal de que Washington probablemente no podrá resolver una disputa sobre impuestos y gastos hasta el 2013.
El reconocimiento de la derrota por parte de republicanos y demócratas del "súper comité" de 12 miembros del Congreso posiblemente consolidará la percepción entre los votantes y los inversores de que los políticos están demasiado divididos para abordar el déficit de presupuesto de un billón de dólares.
"A pesar de nuestra incapacidad para estrechar las importantes diferencias del comité, nosotros ponemos fin a este proceso unidos en nuestra creencia de que el déficit fiscal de nuestra nación debe ser abordado y que no podemos dejar que la próxima generación lo resuelva", dijeron el representante republicano Jeb Hensarling y la senadora demócrata Patty Murray en un comunicado conjunto.
Pero los legisladores estarán menos dispuestos a lograr un acuerdo a medida que pongan su atención en la campaña para las elecciones presidenciales y legislativas de noviembre del 2012.
Las acusaciones comenzaron minutos después del anuncio.
El presidente Barack Obama dijo en la Casa Blanca que los republicanos habían echado por tierra las negociaciones al rehusarse a considerar alzas de impuestos a los ricos.
"Ellos no se moverán de esa posición de negociación y hasta ahora esa negativa ha sido el principal obstáculo que ha evitado que el Congreso logre un acuerdo para reducir aún más el déficit", dijo Obama en la Casa Blanca.
Los republicanos culparon a Obama de falta de liderazgo y dijeron que los demócratas no estuvieron dispuestos a considerar una reforma fundamental a los programas de salud que opera el Gobierno que podrían estancar la economía en las próximas décadas a medida que la población envejezca.
El panel esperó hasta después del cierre de los mercados a las 2100 GMT para declarar formalmente fracasado su esfuerzo, pero las acciones en Wall Street ya habían tocado un mínimo de un mes debido a los temores por las deudas fuera de control en Europa y Estados Unidos.
El índice Nikkei de Japón abrió a la baja este martes, alcanzo su nivel más bajo en ocho meses.
Incertidumbre en el futuro. El fracaso del comité en sus intentos por lograr un acuerdo para reducir el déficit en US$1,2 billones da pie a un año de incertidumbre sobre impuestos y gasto que podría preocupar aún más a los inversores, temerosos por los problemas de deuda de la zona euro.
El Congreso debe ahora generar esos ahorros en el presupuesto mediante recortes automáticos a los programas nacionales y de defensa, pero algunos republicanos han prometido que evitarán que afecten al Ejército. Obama dijo que vetaría cualquier esfuerzo por hacerlo.
El deberá lidiar con un esfuerzo de cabildeo liderado por su propio secretario de Defensa para mantener el presupuesto del Pentágono.
"Si el Congreso no logra actuar durante el próximo año, el Departamento de Defensa enfrentará devastadores recortes automáticos generalizados que rasgarán la defensa de la nación", dijo el secretario de Defensa, Leon Panetta.
Las agencias de crédito, que ya están consternadas por la incapacidad de Washington para elaborar un plan de creíble para abordar la deuda del país, podrían rebajar la calificación de Estados Unidos si los recortes son revocados.
Standard & Poor's dijo que la noticias validan su decisión de emitir la primera rebaja a la calificación de crédito de Estados Unidos en agosto. Moody's Investors Service dijo que el fracaso, en sí mismo, no llevaría a un cambio de calificación.
Fitch dijo que terminaría su evaluación de la calificación de Estados Unidos a fin de mes. Anteriormente había señalado que un fracaso del súper comité a la hora de lograr un acuerdo resultaría probablemente en un panorama negativo.
El Congreso deberá crear cerca de US$4 billones en ahorros para garantizar que la deuda nacional, ahora en US$15 billones, no empantane a la economía, dijeron expertos sobre presupuesto.
"Estados Unidos está en un camino de deuda peligroso, y el anuncio de hoy no hace nada por cambiarlo", dijo Maya MacGuineas, jefa del grupo de expertos Comité por un Presupuesto Federal Responsable.
En las próximas semanas, los demócratas buscarán extender las medidas para impulsar la economía, como recortes tributarios a los trabajadores y beneficios mejorados a los desempleados, los que vencen a fines de año.
Analistas dicen que la economía podría sufrir si no se extienden esas medidas, pero los republicanos posiblemente insistirán en reducir el gasto para compensar su costo de US$168.000 millones.
Manteniendo la presión sobre los republicanos, Obama reiterará este martes su llamado al Congreso para que apruebe los recortes tributarios a las nóminas de pagos durante un viaje a Nueva Hampshire.