En declaraciones a la prensa tras una reunión de gabinete, el primer ministro italiano refirió que es importante para la dignidad y la confianza de un país no tener que depender de la ayuda externa.
Roma. El primer ministro italiano, Mario Monti, dijo este viernes que el país debería intentar superar la crisis financiera, que ha disparado sus costos de endeudamiento, sin la ayuda de rescates por parte de sus socios europeos.
La tercera mayor economía de la zona euro va por buen camino para cumplir con sus metas y acabar con el déficit público este año y el próximo, sostuvo Monti, aunque instó a los legisladores a continuar con las reformas para garantizar que el país pueda resolver sus problemas por sí solo.
En declaraciones a la prensa tras una reunión de gabinete, Monti refirió que es importante para la dignidad y la confianza de un país no tener que depender de la ayuda externa.
"Creo que es mejor si uno cuenta con la colaboración de todos, pero no estar entre aquellos que tienen que tender la mano", manifestó.
El primer ministro dijo también que no hay necesidad de que su gobierno apruebe nuevas medidas de austeridad y negó los reportes de que está planeando introducir un impuesto especial sobre el patrimonio.
Monti ha presionado a los socios europeos para lograr un acuerdo que permitiría que los fondos de rescate de la Unión Europea sean utilizados para limitar las fuertes fluctuaciones del mercado sin la necesidad de un rescate financiero a gran escala.
No obstante, Monti sostuvo que Roma actualmente no tiene planes de buscar ayuda y ha descartado firmemente la necesidad de un rescate más amplio al estilo de Grecia.
Las crecientes preocupaciones sobre si España puede evitar el pedido de un rescate a sus prestamistas internacionales ayudaron a impulsar el rendimiento de los bonos italianos el viernes y llevaron al diferencial frente a los papeles alemanes a cerca de 500 puntos base.
Monti dijo que las altas tasas de endeudamiento en Italia eran decepcionantes considerando las reformas que su Gobierno ha aprobado y manifestó que la acción insuficiente a nivel de Europa y la incertidumbre política en Italia mantenían el nerviosismo en los mercados.
Italia realizará elecciones generales el próximo año, pero Monti ha descartado participar como candidato, mientras que el ex primer ministro Silvio Berlusconi dio señales esta semana de que volvería al escenario político.
La agencia Moody's recortó la semana pasada la calificación de deuda de Italia en dos escalones y la dejó justo por encima del bono basura.
La agencia elogió los esfuerzos de Monti de implementar una reforma, pero advirtió que podría reducir de nuevo la nota de deuda del país si el próximo Gobierno italiano no continúa por el mismo sendero.