Bini Smaghi repitió las críticas hechas por su colega en el Banco Central Europeo, Jens Weidmann, después de que la entidad cediera en su negativa a una moratoria temporal de la deuda de ese país.

Berlin. La estrategia de la zona euro para lidiar con la crisis de deuda de Grecia tiene un precio y debería mantenerse como un caso aislado, dijo Lorenzo Bini Smaghi, miembro de la Junta Ejecutiva del BCE, citado por un diario alemán.

Bini Smaghi repitió las críticas hechas por su colega en el Banco Central Europeo, Jens Weidmann, después de que la entidad cediera en su negativa a una moratoria temporal de la deuda griega, dando a un foro de emergencia de los líderes de la zona euro vía libre para acordar un segundo rescate del endeudado país.

Un día antes de la reunión del jueves, Bini Smaghi había dicho que una reestructuración de la deuda griega -laxa o férrea- sería "un desastre".

"Dada la dificultad de la situación, ciertamente se encontró un buen compromiso", dijo el estratega, citado en la publicación previa de una entrevista que saldrá en la edición dominical del Welt am Sonntag. "Pero no deberíamos actuar como si este acuerdo estuviera libre de cargos", sostuvo.

Los líderes de la zona euro anunciaron el jueves un segundo rescate para Atenas. La ayuda consiste en 109.000 millones de euros (US$156.000M) en dinero público, más una contribución sustancial de tenedores de bonos provenientes del sector privado, quienes canjearán voluntariamente sus papeles griegos por deuda de vencimientos más largos a tasas de interés más bajas.

Para que el acuerdo fuera posible, el BCE tuvo que ceder en su negativa a una moratoria griega. La entidad señaló que estaba dispuesta a dejar que la moratoria fuera temporal siempre que fuera un caso estrictamente extraordinario.

"El acuerdo debe permanecer como un caso aislado. Irlanda y Portugal han mostrado su determinación para desarrollar sus planes de ahorro y (estos) están en curso", dijo Bini Smaghi.

Bini Smaghi -presionado para dejar el BCE a fin de facilitar la vía a su compatriota Mario Draghi a la presidencia del banco- dijo que el debate sobre una reestructuración de deuda había desestabilizado a los mercados financieros y debilitado la unión monetaria.

"Debemos evitar falsos incentivos y la impresión de que la reestructuración es una salida fácil", dijo. "No podemos premiar a los países que no se apegan a las normas del pacto de estabilidad", sostuvo.

Sobre Italia, Bini Smaghi dijo que confiaba en que, pese a las próximas elecciones, el Gobierno respetaría el plan de austeridad lanzado a comienzos de este mes para evitar una crisis fiscal.