El país muestra que los programas de ajustes económicos de la eurozona funcionan, dijo Wolfgang Schaeuble.
Hannover. El ejemplo de Portugal demuestra que los programas de ajustes económicos de la zona euro están funcionando, ya que los países del sur de Europa volverán a registrar un superávit primario en el 2013, dijo este lunes el ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schaeuble.
Schaeuble añadió que Grecia, donde se ha estancado el programa de reformas vinculadas al doble rescate, no debería ser el único caso que se tenga en cuenta para analizar la capacidad de lucha de la unión monetaria contra la crisis de deuda.
Los prestamistas internacionales de Portugal no daban señales el lunes de estar preparados para flexibilizar las complejas metas fiscales impuestas al país, lo que causaba decepción entre empresarios y líderes sindicales, que esperaban algunas concesiones.
Portugal se ha apegado rígidamente a los objetivos fijados en el rescate de 78.000 millones de euros, incluso pese a que la economía está sumida en la recesión.
Aludiendo a criterios más flexibles en la ayuda para otros países como Grecia y España, Portugal esperaba convencer a los inspectores de la Unión Europea, el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional de relajar o retroceder en sus objetivos durante la quinta ronda de revisión del rescate, que se inició la semana pasada.
Sin embargo, no ha habido señales de eso durante las reuniones con los inspectores de la 'troika' realizadas este lunes.
"Estos caballeros se comportan como verdaderos robots", dijo Armenio Carlos, líder del mayor sindicato de Portugal, la CGTP.
"Francamente, estamos muy decepcionados", coincidió el jefe de la confederación de comercio y servicios del país, Joao Vieira Lopes, en declaraciones realizadas a la prensa. "No tenemos idea de si habrá alguna flexibilidad por parte de la troika en términos de nuevos plazos u objetivos".
La Comisión Europea en Lisboa no comentó sobre la reunión y no hubo representantes del FMI inmediatamente disponibles para realizar declaraciones.
El Gobierno ha dicho reiteradamente que su objetivo primordial es cumplir con las exigencias presupuestarias y que cualquier fracaso sería un retroceso para el país, que lucha por replicar el éxito de Irlanda con su rescate en lugar de caer en una crisis más compleja, como la de Grecia.