Así lo aseguró Ildefonso Guajardo Villarreal, al ejemplificar que la reforma energética lo que hace es “emparejar el terreno del juego”.
Su titular entregó subvenciones del programa USAID a cuatro emprendedores mexicanos.
El común denominador de las reformas estructurales está orientado fundamentalmente a romper la inercia que impide que se conecten a la globalidad y al comercio las micro, pequeñas y medianas empresas, además de las regiones menos desarrolladas del país.
Así lo aseguró el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo Villarreal, al ejemplificar que la reforma energética lo que hace es “emparejar el terreno del juego”.
Es decir, explicó, entre una gran empresa que puede generar su propia energía y otra pequeña que debe comprarla en una empresa pública a precio 70% más caro, en comparación con un competidor similar en Estados Unidos.
“Y así, cada una de las reformas tiene un enfoque que está orientado a cómo liberar el potencial que no se ha desarrollado en un México tradicional que aún no se integra, ni se beneficia de la integración a la globalidad”, expuso.
Dijo que México se encuentra en una coyuntura global que presenta una gran oportunidad para América del Norte. “Tenemos como región el beneficio de estar sentados en una de las fuentes de energía más competitivas y abundantes del mundo.
“Con la reforma energética de México nos incorporaremos al paso en que van Estados Unidos y Canadá para el acceso al gas Shell y a fuentes de energía alternativa”, señaló.
Esto, dijo, dará una ventaja competitiva frente al mundo y traerá la relocalización de la manufactura de América de Norte.
Señaló que otros factores positivos serán el hecho de que para 2015, de acuerdo con un censo de Estados Unidos, la fuerza mexicana de trabajo aumentará 31,0%; mientras que la de China y Corea decrecerán 26 y 31%, respectivamente.
Al respecto, el embajador de Estados Unidos en México, Anthony Wayne, reconoció las reformas estructurales hechas por el gobierno mexicano, y aseguró que sin duda alguna servirán para impulsar la innovación y la competencia en el país.
Destacó que la relación comercial y de inversión entre ambos países es de las más fructíferas en el mundo, definida por la apertura y cooperación, además de que el intercambio comercial entre ambos países representa más de US$500.000 millones anuales.
Asimismo, Wayne refirió que las inversiones de empresas de Estados Unidos aumentaron en México, ya que alrededor de 20.000 compañías de esa nación realizan operaciones en México.
Agregó que a ello se suma que hoy en día México ocupa en su país el número 15 como fuente de inversión extranjera, “generando con esto miles de trabajos en el país”.
Tanto el titular de la SE como el Embajador de Estados Unidos en México señalaron lo anterior, en el marco de la entrega a cuatro emprendedores mexicanos de subvenciones mediante el Fondo de Innovación para las Américas de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID).
La finalidad de tales reconocimientos es la promoción de la innovación en México a través de la propia USAID, la embajada de México en Estados Unidos y la Secretaría de Economía.
En este contexto, el administrador de la USAID, Rajiv Shah, expuso que es necesario seguir otorgando fondos a los descubrimientos, a las soluciones innovadoras, como los proyectos de los cuatro mexicanos, “para resolver nuestros más complicados retos de desarrollo”.
Expresó que los emprendedores son la puerta hacia ideas sostenibles y creativas que tendrán un impacto duradero en las vidas de las personas.
Cabe destacar que con más de 800,000 dólares en subvenciones, los galardonados implementarán sus proyectos para mejorar los estándares de vida, otorgar capacitación laboral e incrementar los ingresos de miles de personas marginadas en todo México.