A juicio del ministro de Wolfgang Schäuble, los griegos votaron a un Ejecutivo que no ha demostrado de dónde sacará fondos para cumplir sus promesas.
En una entrevista radial concedida este lunes, el ministro de Finanzas de Alemania, Wolfgang Schäuble, manifestó sus dudas sobre las posibilidades de que Grecia y sus pares de la zona euro alcancen un acuerdo sobre la deuda de Atenas. Esto, en el marco de unas conversaciones que comienzan precisamente en esta jornada en Bruselas, donde el ministro de Finanzas griego y sus colegas discutirán sobre el programa de rescate que expira el 28 de febrero.
“Por lo que he escuchado sobre las conversaciones técnicas durante el fin de semana, soy muy escéptico, pero vamos a recibir un reporte y entonces veremos”, dijo el ministro de la canciller Angela Merkel sobre si los titulares de Finanzas encontrarán finalmente una solución a los problemas de la deuda contraída por Atenas con diversos acreedores, entre ellos el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional.
Schäuble aseguró que Alemania no quería una salida de Grecia de la zona euro, pero sostuvo que el nuevo Gobierno en Atenas tenía que cumplir “el mínimo de las demandas”. El ministro alemán insistió en que, para seguir recibiendo ayuda de los otros países de la eurozona, Grecia tiene que mostrar cómo en el futuro va a asegurar los medios suficientes para financiar sus propias pretensiones
Grecia iba bien. Las palabras del ministro alemán no se quedaron ahí. En la conversación con la emisora alemana Deutschlandfunk (DLF), dijo que sentía mucho que los griegos hubieran votado al gobierno de Alexis Tsipras. “Lo siento por los griegos. Han elegido un gobierno que de momento se comporta de manera bastante irresponsable”. Para Schäuble, Grecia iba bien encaminada a superar la crisis cuando llegó el nuevo Ejecutivo al poder.
De momento, según Schäuble, no hay ningún indicio que muestre que el gobierno de Tsipras va a presentar propuestas para hacerse cargo de sus propias promesas electorales. Grecia y el Eurogrupo están bajo presión para llegar a un acuerdo pues el programa de ayuda vigente vence a finales de este mes después de lo cual los griegos podrían quedar en situación de insolvencia.