José Luis Silva, titular de Comercio Exterior y Turismo dijo que la denuncia de prácticas anti laborales en el sector exportador de parte de algunas ONG no tiene ningún sentido.
Lima, Andina. Existen Organismos No Gubernamentales (ONG) extranjeros que buscan desestabilizar a las empresas exportadoras para que pierdan competitividad ante otros países, por lo que tenemos que trabajar de manera coordinada con los distintos estamentos del Estado, señaló el ministro de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur), José Luis Silva.
Indicó que la denuncia de prácticas anti laborales en el sector exportador de parte de algunas ONG no tiene ningún sentido.
“Hace poco hemos visto que algunas ONG y otras empresas, motivadas por las ONG, han salido ha denunciar que hay practicas negativas y anti laborales en el sector exportador peruano, cuando es todo lo contrario”, sostuvo.
Manifestó que la gran mayoría de las empresas en el Perú tiene estándares y certificaciones laborales internacionales, pero lamentablemente a veces hacemos más caso cuando alguien de afuera hace una denuncia.
“Las ONG extranjeras están en el país para desestabilizar en algunos casos y en otras para generar mayores costos a las empresas peruanas, para que pierdan competitividad ante sus pares de otros países”, denunció.
En ese sentido, consideró importante trabajar de manera coherente y coordinada, pues el Perú requiere empresas formales fuertes. “No podemos matar a las vacas que nos dan leche”, añadió.
Citó como ejemplo a la ONG que promovió el baguazo hace algunos años, por la Ley Forestal, la misma que está detrás de muchos movimientos anti mineros en el país.
Refirió que en el caso del baguazo estaban detrás de esta ONG empresas madereras de otros países y en el caso de Conga (en Cajamarca) y otros proyectos mineros están detrás las mineras de otros países, productores de oro, por ejemplo.
“Que no haya avanzado el proyecto Conga favorece a otras empresas auríferas”, anotó.
Igualmente, reveló que en el caso de las ONG reclamando derechos laborales, se trata de puras movidas de empresas del sector agroexportador y confecciones de otros países.
“Tenemos que darnos cuenta de que nos estamos poniendo sobre pesos o sobre costos a la hora de competir internacionalmente si hacemos caso a estas ONG supuestamente preocupadas por los derechos laborales”, sostuvo.
Asimismo, añadió que existen iniciativas en el Congreso de la República, en temas laborales y tributarios, que no contribuyen a la competitividad de las empresas y que más bien podrían sacar del mercado a muchas de ellas.
“Estas iniciativas están orientadas a lo rubros laborales y tributarios que son espadas de Damocles para las empresas del país”, advirtió.
En ese contexto, apuntó que igualmente hay que trabajar juntos con los distintos estamentos del Estado y el Congreso para ver de qué manera se hace mucho más competitivas a las empresas para que puedan enfrentar los retos de los próximos años.
“Hemos promovido la competitividad y tenemos que adaptarnos a los cambios, pues es la única forma de adecuarnos a un mundo en transformación”, dijo.
Refirió que el Perú tiene una apertura total frente a 180 países del mundo, pero no existe reciprocidad, cuando todos deberíamos competir en igualdad de condiciones, y si al Perú se le exigen condiciones medio ambientales, los demás países también tendrían que cumplirlos.