El pasado 21 de agosto el banco emisor mantuvo sin cambios su tipo referencial en un 4,5%, con lo que completó un año en ese nivel, una decisión que no contó con el voto unánime del directorio de siete miembros.
Las minutas del encuentro del Banco Central de Colombia de agosto mostraron que continúa la división sobre la conveniencia de mantener la tasa de interés estable para apoyar a la economía o subirla para anclar las expectativas de inflación, pero se suavizó el tono alcista de la reunión anterior.
El pasado 21 de agosto el banco emisor mantuvo sin cambios su tipo referencial en un 4,5%, con lo que completó un año en ese nivel, una decisión que no contó con el voto unánime del directorio de siete miembros.
Las memorias revelaron que unos funcionarios concuerdan en que la información reciente apunta a un menor crecimiento, lo que ayudaría a que la inflación converja hacia la meta, ante lo cual "la actual postura de política jugaría a favor del cumplimiento de sus objetivos".
En contraste, otro grupo expresó que la presión al alza de la inflación proveniente del traslado de la devaluación del peso a los precios, si bien es temporal, puede desanclar las expectativas, produciendo una situación de inestabilidad que haga inevitables drásticas medidas de política en el futuro, ante lo cual sería conveniente subir la tasa 25 puntos base.
Mientras, otros integrantes de la junta consideraron que dado el anclaje actual de las expectativas de inflación, es apropiado tener más información sobre la evolución de la economía para realizar un mejor balance de riesgos.
El tono de ese grupo se suavizó frente a las minutas de la reunión de julio, cuando algunos miembros manifestaron que si bien existían argumentos para un alza preventiva de la tasa de interés por el aumento del riesgo de que las expectativas de inflación se desvíen de la meta, también existía el peligro de que la economía crezca por debajo de lo previsto.
"Para ellos, esa nueva información contribuirá a balancear de mejor manera los riesgos entre una mayor inflación y un ajuste excesivo del crecimiento económico, que en el corto plazo se contraponen para la decisión de la postura de política", precisaron las minutas.
Un reciente sondeo de Reuters mostró que a la mayoría de los miembros del directorio del banco emisor se le percibe como proclive a un alza de la tasa de interés, debido al repunte de las expectativas de inflación.
