A las 1150 GMT, el peso mexicano colapsaba un 8,5% a 19,868 por dólar en la plaza "offshore", ubicándose en un nuevo mínimo.

Las monedas latinoamericanas se hundían en los primeros negocios del miércoles, antes de la apertura formal de los mercados más amplios de la región, en línea con la turbulencia en todos los activos globales por el inesperado triunfo del republicano Donald Trump en las elecciones de Estados Unidos.

A las 1150 GMT, el peso mexicano colapsaba un 8,5% a 19,868 por dólar en la plaza "offshore", ubicándose en un nuevo mínimo. La moneda ha sido la más golpeada entre las emergentes por las intenciones de Trump de romper o renegociar el acuerdo comercial de Estados Unidos con su vecino.

"México probablemente esté entre los países que enfrenten las implicaciones económicas más importantes después del triunfo de Trump", dijo un reporte de HSBC. "Junto con China, unos profundos cambios en el comercio y la migración probablemente ejerzan un impacto grande en la economía mexicana".

Entre los agentes del mercado crecían las especulaciones sobre qué podría anunciar el gobierno de México en una conferencia de prensa que programó para primera hora del miércoles, de cara a un aumento de las preocupaciones por la estabilidad financiera en general del país.

Según un informe de Societe Generale, entre cuatro medidas posibles, se podría disponer "un ajuste de 100 o 150 puntos básicos en la tasa interbancaria (del banco central mexicano) hoy o a ser implementada en los próximos días o semanas" para frenar el derrumbe del peso y apuntalar su economía.

Gabriel Casillas, economista de Banorte-IXE, dijo que el peso podría sufrir por meses mientras el mercado trata de averiguar lo que Trump hará en la presidencia. "Lo peor será (...) antes de la toma de posesión (...) las empresas pospondrán inversiones", sostuvo.

El real brasileño caía un 2,5% a 2,245. Los activos de Brasil sufrirían un impacto menor que los mexicanos pues su economía tiene una integración más limitada con Estados Unidos, aunque de todos modos estaban expuestos a la aversión al riesgo que afectaba a todos los mercados mundiales.

"Ahora mismo, el gran tema es la incertidumbre", dijo Paulo Nepomuceno, jefe de operaciones de renta fija de la firma Coinvalores en Sao Paulo. "No se sabe qué hará Trump y cómo eso podría afectar a la economía brasileña, lo más seguro es salir" de los activos de riesgo, agregó.

Aparte de la moneda mexicana, también se esperaba un efecto considerable en el peso de Colombia. En contraste, el peso de Argentina continuaría relativamente ajeno debido a la menor conexión del país con Estados Unidos. Las principales bolsas de América Latina aún no habían abierto a las 1150 GMT.