El ministro de Hacienda dijo que habrá una baja promedio de 20% en el precio de la energía eléctrica para los consumidores el próximo año, aunque anticipó que puede haber un aumento del precio de la gasolina
Brasilia. Nuevas reducciones impositivas a las anunciadas este año, que sumaron unos 45.000 millones de reales (unos US$22.000 millones), serán promovidas por el gobierno brasileño, sumando otros 40.000 millones de reales (poco menos de US$20.000 millones, dijo el ministro de Hacienda, Guido Mantega.
En encuentro con periodistas, Mantega afirmó que las nuevas desoneraciones serán permanentes y esenciales para mejorar la competitividad de la economía brasileña.
Según el ministro, no será permanente la reducción del Impuesto a los Productos Industrializados (IPI), que tiene carácter temporario, pero lo será la inclusión de diversos sectores de la industria en un nuevo cálculo de la contribución previsional, que reducirá los costos laborales para las empresas.
Mantega subrayó que los estímulos puntuales para determinados sectores,como automóviles y electrodomésticos de la línea blanca, concedidos a lo largo de 2012, fueron necesarios para evitar despidos.
"Esos son instrumentos de corto plazo que ahora son combinados con medidas de largo plazo que representan un cambio estructural de la economía", señaló.
Garantizó además que habrá una baja promedio de 20% en el precio de la energía eléctrica para los consumidores el próximo año, aunque anticipó que puede haber un aumento del precio de la gasolina.
Destacó que el país está pagando cada vez menos intereses de la deuda pública, gracias a la solidez fiscal, lo que abre espacio para reducciones permanentes de tributos sin perjudicar el equilibrio de las cuentas públicas.
El pago de intereses de la deuda pública cayó de 5,8% del Producto Interno Bruto (PIB) en 2011 a 4,6% este año, y debe cerrar 2013 en 4,4%.