El presidente de EE.UU. y actual candidato demócrata ha hecho llamados a los líderes europeos para que recapitalicen a los bancos en problemas y se centren en el crecimiento económico, no sólo en la austeridad.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, presionará la semana próxima a los líderes europeos para que resuelvan su crisis de deuda, aunque Washington no espera demasiados progresos antes de fines de este mes, dijo el domingo un asesor de la Casa Blanca.
Obama participará en una cumbre de dos días con líderes del Grupo de las 20 mayores economías (G-20) que comienza el lunes México. El presidente demócrata ha hecho llamados a los líderes europeos para que recapitalicen a los bancos en problemas y se centren en el crecimiento económico, no sólo en la austeridad.
"Vamos a continuar presionando", dijo David Plouffe, un alto asesor de Obama, al programa "This Week" de la cadena de televisión ABC.
"Habrá progresos en las próximos días, pero nadie debería esperar una resolución concreta", declaró.
La cumbre del G-20 reúne a los líderes de las grandes economías industriales y emergentes, incluyendo a los pesos pesados de la zona euro como Alemania, Francia e Italia.
La crisis financiera de Europa podría fácilmente generar una recesión mundial si el bloque de 17 naciones colapsa. La zona euro el principal socio comercial de Estados Unidos y varios de sus miembros, incluyendo a España, Holanda, Italia y Grecia, ya se encuentran en recesión.
La crisis amenaza con agudizarse por el resultado de las elecciones en Grecia, que tiene las autoridades de todo el mundo preparándose para una posible salida del país heleno del bloque monetario.
La Unión Europea sostendrá su propia cumbre de líderes el 28 y 29 de junio para discutir un calendario sobre posibles reformas radicales que podrían crear una unión fiscal en Europea. Plouffe que el encuentro sería la vía para conseguir más progresos sustanciales.
"Ahí es donde ojalá veamos realmente más confianza y progreso en que pueden manejar esto", dijo Plouffe.
La crisis coincide con la campaña de Obama por la reelección en las elecciones de noviembre.
El candidato republicano a la presidencia, Mitt Romney, suele acusar a Obama de utilizar políticas de bienestar al estilo europeo para llevar a Estados Unidos por un camino de ruina fiscal.
El domingo, Romney dejó en claro que se oponía a utilizar dólares de los contribuyentes estadounidenses para rescatar a países europeos. "No enviaremos cheques a Europa", dijo Romney al programa "Face the Nation" de CBS.
Obama también ha dicho que los europeos deben resolver sus propios problemas.
Romney dijo que los bancos estadounidenses eran más fuertes que hace un par de años y que esperaría "que a pesar de lo que pasa en Europa, nuestro sector bancario sea capaz de superar la tormenta".