El director general de la Organización Internacional del Trabajo, el chileno Juan Somavia, señaló que la justicia social es necesaria para lograr un crecimiento y desarrollo económicos sustentable.
Washington. La Organización Internacional del Trabajo (OIT), advirtió este sábado que tras años de crecimiento desbalanceado y crisis global han recrudecido las tensiones sociales en muchas partes del mundo y el desempleo sigue vivo como una gran amenaza.
El director general de la OIT, el chileno Juan Somavia, señaló que la justicia social es necesaria para lograr un crecimiento y desarrollo económicos sustentable.
"La actual forma de globalización, dominada por el sector de servicios financieros es insustentable económica, social y políticamente", dijo Somavía durante su intervención en la Asamblea de Primavera del FMI.
Alertó al FMI y a su Comité de Desarrollo que la persistente debilidad global para abrir oportunidades de trabajos decentes y bien remunerados y las crecientes brechas sociales, amenazan con socavar la todavía frágil recuperación de la economía mundial.
Señaló que este cuadro ha estado presente en las recientes olas de violencia social y política en países del norte de Africa y el Medio Oriente.
"Los indicadores macroeconómicos han mejorado, pero no así las cifras de empleo o ingresos de los trabajadores", dijo al explicar que el desempleo abierto en 2010 alcanzó a 205 millones de personas, una cifra que se mantiene sin cambios y que supera en 30 millones la de 2007, antes del estallido de la crisis financiera global.
"Cerca de 1.200 millones de hombres y mujeres trabajadoras, es decir, el 39% de la fuerza de trabajo global- viven y mantienen a sus familias con menos de $2 por día por persona", recalcó.
"Muchas economías simplemente no están generando suficientes oportunidades de empleos decentes para absorber el crecimiento de la población en edad de trabajar y reducir la pobreza", observó Somavia.