Junto al ministro de Industria y Comercio, Munir Fajri Abdel Nur, Roberto Azevêdo explicó que este mes habrá una reunión para evaluar la situación actual.
El Cairo. El director general de la Organización Mundial del Comercio (OMC), Roberto Azevêdo, visitó Egipto con el fin de recabar apoyos para una nueva ronda de consultas, tras el fracaso en la implantación del acuerdo comercial alcanzado en Bali el año pasado.
En una rueda de prensa junto al ministro egipcio de Industria y Comercio, Munir Fajri Abdel Nur, Azevêdo explicó que este mes habrá una reunión en Ginebra con los embajadores de los países de la organización para evaluar la situación actual y las diferentes opciones para salir de la crisis.
"Después tendremos que juntarnos para ver el resultado de las consultas para resolver esta situación de punto muerto", apuntó el titular de la OMC, que consideró "muy difícil predecir" lo que pasará entonces.
En ese sentido, el responsable brasileño pidió a Egipto que sea "activo" en aportar soluciones frente al escollo que supuso el reciente veto de India a la aprobación de un protocolo que iba a permitir adoptar el primer acuerdo logrado en el seno de la OMC en más de veinte años.
India decidió bloquear el protocolo -que debía aprobarse por consenso antes del 31 de julio- tras no obtener garantías de protección a largo plazo de su programa de subsidios agrícolas para garantizar la seguridad alimentaria en un país de 600 millones de pobres.
"La seguridad alimentaria es una cuestión muy importante y legítima", aseguró Azevêdo, para quien la pregunta es "cómo se puede avanzar en ese sentido sin dejar de implantar lo que fue acordado en Bali".
En esa isla indonesia, los 159 países de la OMC llegaron en diciembre pasado al llamado Acuerdo de Facilitación del Comercio, que establece medidas para facilitar el flujo de bienes en las aduanas, reducir la burocracia y multiplicar los intercambios comerciales.
Pese a la falta de consenso para poner en marcha el protocolo de ese acuerdo, el director general de la OMC insistió en la necesidad de seguir conversando para apoyar a los países en desarrollo y de la contribución de estos últimos para obtener resultados globales.
"Tenemos que recobrar la confianza y negociar acuerdos de forma multilateral", reiteró el responsable, consciente del problema que existe para implantar el citado acuerdo.
Respecto a Egipto, Azevêdo consideró que el país está haciendo reformas económicas "muy importantes", refiriéndose también al actual proyecto de construcción de un canal paralelo al de Suez como un "elemento de desarrollo que permitirá reducir los costos empresariales".
Por su parte, el ministro egipcio mostró la disposición de su país a seguir negociando para hallar una solución al problema de la implantación del acuerdo y mantener los contactos con los distintos países.