Junto a ello, el sólido resultado del reporte mensual sobre el mercado laboral de Estados Unidos, divulgado este viernes, configuró el ambiente adecuado para mirar el último mes del año con un moderado optimismo.
México DF. Las monedas de América Latina seguirían siendo favorecidas esta semana por la convicción de los inversores de que una cumbre de líderes europeos este viernes dará a luz una solución efectiva para frenar la crisis soberana del bloque, que amenaza a la economía global.
Al cierre de la semana pasada, los rendimientos de los bonos emitidos por Italia y España cayeron, y podrían retroceder más por la creencia cada vez más extendida de que los líderes de la región podrían acordar propuestas definitivas para detener la crisis del bloque.
Junto a ello, el sólido resultado del reporte mensual sobre el mercado laboral de Estados Unidos divulgado el viernes configuró el ambiente adecuado para mirar el último mes del año con un moderado optimismo.
"La semana va estar asociada a la expectativa por la última reunión del año importante de líderes europeos que es el viernes, entonces toda la semana van a hablar de eso y podría generarse algún entusiasmo", comentó Jorge Gordillo, subdirector de análisis de CI Banco en la Ciudad de México.
En el caso del peso mexicano , se espera que los inversores apuesten por él con cautela -operando alrededor de 13,30 a 13,70 por dólar- y que dejen atrás el severo castigo que lo llevó a niveles mínimos de más de dos años y medio.
En ese sentido, la decisión del banco central local de reactivar un sistema de subastas de hasta 400 millones de dólares diarios, en caso de una depreciación mayor al 2%, podría actuar como un freno a la volatilidad.
"Ya llevábamos varias semanas donde el peso se estaba moviendo de más comparado a otras monedas (...) a lo mejor esta decisión del Banco de México (central) hace que se vean más limitados los movimientos", agregó Gordillo.
El real tendría un impulso extra por la decisión de las autoridades financieras de Brasil de impulsar el crédito y bajar los impuestos a las inversiones en acciones y bonos locales.
La moneda brasileña cerró el viernes en 1,7874/1,7884 unidades por dólar, su mejor nivel desde el 18 de noviembre, y registró además una ganancia semanal del 5,2%.
"Creo que podemos atribuir cerca de dos tercios del resultado de Brasil en la semana a Europa y cerca de un tercio a factores locales", dijo Michael Woolfolk, estratega cambiario de BNY Mellon en Nueva York.
Venta en Chile, compra en Perú. En tanto, el peso chileno podría ceder terreno esta semana ante el dólar debido a tomas de ganancias.
"La semana pasada, los mercados mundiales alcanzaron niveles importantes y podríamos entrar a una semana de correcciones técnicas y tomas de ganancias, ya que todavía no tenemos nada concreto frente a la crisis que amenaza a Europa", dijo Samuel Levy, analista de Xdirect en Santiago.
Se estima que la moneda chilena fluctúe en un rango entre las CH$508 y CH$520 unidades por dólar en los próximos días.
El sol peruano podría apreciarse por la demanda estacional de personas y empresas para el pago de gratificaciones y gastos relacionados a las fiestas de fin de año, mientras que el banco central continuaría acompañando esta tendencia con compras de dólares para reducir la volatilidad.
"Esperamos un rango de entre 2,69 y 2,70 para los próximos días, en línea con nuestra proyección de 2,68 para fin de este año", dijo Mario Guerrero, analista de Scotiabank en Lima.
En Argentina, los negocios cambiarios seguirían limitados por los controles gubernamentales para desalentar la compra de divisas y frenar la salida de capitales del país.
El peso interbancario o mayorista argentino, donde opera el Banco Central con compras o ventas de dólares de sus reservas, continuará estabilizado en torno a los 4,2825/4,285 unidades por dólar, estimaron fuentes del mercado.
Por su parte, el peso en el mercado informal mantendría su quietud con valores indicativos en la zona de los 4,7 pesos por dólar.