El sistema financiero hará del crédito un motor de crecimiento más sólido y robusto, dijo el presidente mexicano.
Durante la promulgación de la reforma financiera en Los Pinos, el presidente Enrique Peña Nieto expresó que esta reforma confirma el clima de civilidad política que hay en el país.
"Se ratifica el clima de madurez y civilidad política que distingue a la política mexicana. Se suma a otras transformaciones logradas en 2013 y ahora debemos reflejar día a día en la ida de los mexicanos.”
Y después de que el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, expresara que en el 2013 los créditos de la banca crecieron en 6,6%, llegando un millón de millones de pesos (US$76.667.100.000), el jefe del Ejecutivo planteó la meta para el 2014.
El objetivo es impulsar la banca de desarrollo, recuperar el mandato de la banca del Estado al fomentar el crecimiento en sectores estratégicos... Luego de haber alcanzado el billón de pesos (US$76.667.100.000) en créditos de las instituciones de la banca de desarrollo en el 2013, este año nos habremos de proponer una nueva meta, es al menos llegar a un billón 150 mil pesos para detonar el crecimiento... Significa un incremento del 15% en el crédito que habrá de otorgar la banca.”
“El objetivo de la reforma es dotar al sector productivo de mayores niveles de crédito. A los que antes no tenía acceso”, así lo expuso el secretario de Hacienda, Luis Videgaray.
“En México tenemos una gran oportunidad, uno de los mejores sistemas bancarios, sólidos, bien capitalizados, bien manejados... Sin embargo, es uno de los que menos presta. Tiene una penetración al sector privado de menos del 26%... La reforma que hoy promulga el Presidente permitirá cambiar esta situación; se basa en cuatro pilares, fomentar la competencia, el crédito, ampliar el crédito a través de las instituciones privadas.”
A su vez, el gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, explicó que a mayores niveles de crédito, mayores posibilidades de que crezca el PIB a tasas mayores.
“Hay clara correlación positiva entre crecimiento económico y su correlación con el sistema financiero... Nuestra estimación a partir de la experiencia de un gran número de países en últimos cincuenta años es que en la medida que logremos elevar la penetración financiera del 26% del PIB a más, podría traducirse en mayor tasa de crecimiento del PIB potencial.”
En el evento también participaron el presidente de la Mesa Directiva de la Comisión Permanente del Congreso, el diputado Ricardo Anaya, así como el presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Senadores, Raúl Cervantes.
La reforma se basa en cuatro pilares. Fomentar la competencia en el sector financiero; fomentar el crédito través de la banca de desarrollo; ampliar el crédito a través de las instituciones financieras privadas, y dar mayor solidez y prudencia al sector financiero en su conjunto.
Primer eje. La competencia, se comprenden medidas que fomentan una mayor competencia en todo el sistema financiero. Bajo las mejores condiciones de competencia que se impulsan con esta reforma se habrán de inhibir prácticas anticompetitivas y se propicia la expansión de la oferta del crédito; con ello se habrá de generar una reducción de las tasas de interés, es decir, que el crédito sea más barato.
Por ejemplo, se establece a nivel de ley que los bancos y entidades de los grupos financieros no podrán condicionar la compra de un producto financiero a la adquisición de otro producto con la misma entidad, es decir, se prohíbe por primera vez las llamadas ventas atadas.
Un ejemplo es en la compra, en la adquisición de un crédito automotriz, los grupos financieros no podrán ya condicionar el otorgamiento de un crédito automotriz, por ejemplo, a la compra del seguro con la misma institución financiera. Éstas son nuevas prácticas que implican una mayor competencia y, sobre todo, mayor poder al consumidor, al usuario de la banca, para decidir cuál es la mejor opción en cada uno de los productos financieros.
Asimismo, se fortalecen las atribuciones de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros, la CONDUSEF, a efecto de incluir mayores obligaciones de transparencia en las instituciones financieras y establecer penalidades en contra de las instituciones financieras que no estén a la altura del servicio que le deben de dar a los usuarios de la banca.
Segundo eje. Se fomentará el crédito a través de redefinir el mandato de la banca de desarrollo, lo que le permitirá convertirse en un verdadero motor del crecimiento económico. Se habrá de dar un especial énfasis a las áreas prioritarias para el desarrollo nacional a través de la banca de desarrollo, como son el desarrollo de infraestructura, el apoyo a las pequeñas y medianas empresas, así como la innovación y la creación de patentes.
En el tema de la banca de desarrollo existe un mandato muy específico que tendrán a partir de ahora todas y cada una de las instituciones de la banca de desarrollo, que es promover la perspectiva de género. En congruencia con uno de los ejes transversales del Plan Nacional de Desarrollo, la banca de desarrollo habrá de fomentar programas y productos para lograr una mayor inclusión financiera de las mujeres en todo el país.
Tercer eje. Ampliar el crédito a las instituciones privadas, y para ello se fortalecen las facultades de las autoridades financieras con el propósito de evaluar periódicamente el desempeño de las instituciones de banca múltiple en relación con los niveles de crédito que efectivamente coloquen, de modo que canalicen más recursos a proyectos productivos. El objetivo es muy claro: Que los depósitos de los ahorradores se canalicen al crédito productivo, ésa es la razón social de ser de la banca y la reforma apunta en esa dirección.
La reforma financiera reconoce la necesidad de otorgar mayor certidumbre jurídica en la ejecución de contratos y de fortalecer el esquema de garantías, como medidas necesarias para incentivar la expansión y reducción del costo del crédito; a efecto de reducir el riesgo en la actividad bancaria en beneficio de quienes requieran el crédito, se simplifican los regímenes para el otorgamiento y ejecución de garantías crediticias y para lograr una reducción de los riesgos, y por lo tanto una disminución de los costos del crédito.
Cuarto eje. Es fundamental para la estabilidad macroeconómica; estabilidad que México ha construido a través de una política monetaria autónoma que conduce el Banco de México, de un manejo responsable de las finanzas públicas, y por supuesto a través de la solidez de su sistema financiero.
La reforma establece medidas para fortalecer el marco prudencial actual y dotar a la autoridad de herramientas adecuadas para la regulación y control oportuno del sistema financiero. Para ello, de conformidad con lo dispuesto en el consenso de Basilea III, se elevan a rango de ley las normas para la conformación y calidad del capital actualmente contenidas en regulaciones administrativas. México es, por ende, uno de los primeros países en adoptar a nivel de ley el consenso de Basilea III.
Modifica 34 ordenamientos. Durante el ejercicio anterior, el crédito otorgado por la banca experimentó un crecimiento favorable. La cartera vigente de los portafolios empresarial, de consumo y de vivienda creció en términos reales al 6,6%; el crédito al sector empresarial aumentó a una tasa anual real de 5,2%; mientras el crédito al consumo creció 9,9%, y el crédito a vivienda 6,3%, ambos en términos reales.
Con la reforma es alcanzable en los próximos años duplicar estos crecimientos en promedio, y con ello contribuir aproximadamente en medio punto porcentual adicional al crecimiento de la economía.
*Con información de la Secretaría de Hacienda y Excelsior de México.