Dicho país colocó con gran éxito el Bono Global 2050 y la reapertura del Bono Soberano 2020. Con estas operaciones la economía peruana consigue importantes ahorros en el servicio de intereses de la deuda externa y también ha obtenido un reperfilamiento de sus obligaciones.
Este miércoles la República del Perú realizó con gran éxito la colocación de un nuevo Bono Global por US$ 1.000 millones con vencimiento en el año 2050, así como la reapertura del Bono Soberano 2020 por un monto de S/. 4.196 millones de Nuevos Soles (equivalente a USS$ 1.500 millones). El monto total de las emisiones fue de aproximadamente US$ 2.500 millones.
La colocación del nuevo Bono Global contó con una demanda aproximada de US$ 2.500 millones (2,5 veces la oferta) y un cupón de 5.625%, el más bajo en la historia de emisiones regionales para una emisión de 30 años o más, ofreciendo a los inversionistas un rendimiento de 5,875%. El plazo del bono es el segundo más largo en la historia de bonos globales de América Latina.
La demanda por el Bono Soberano superó los S/. 7.000 millones de Nuevos Soles.
La transacción representa la mayor colocación a inversionistas internacionales de bonos denominados en moneda local por un emisor latinoamericano, lo cual refleja la confianza de los inversionistas en el Perú y en activos denominados en soles.
Los recursos provenientes de estos bonos se destinarán a pre pagar créditos multilaterales, bilaterales y para pre financiamiento de requerimientos financieros de la República para el año 2011.
El gran éxito de la operación se ve reflejado en el monto de la emisión y las condiciones financieras obtenidas. Esta transacción mejora la posición crediticia del país, disminuyendo amortizaciones en el corto plazo, bajando sustancialmente el servicio de la deuda por reducción de tasas de interés, extendiendo la vida promedio de la deuda y sustituyendo deuda denominada en moneda extranjera por deuda denominada en soles.
Logros. El ministro de Economía, Ismael Benavides, comentó que con estas operaciones se han conseguido importantes ahorros en el servicio de intereses de la deuda externa y se ha logrado un reperfilamiento de las obligaciones, extendiendo los plazos sustancialmente y reduciendo los pagos de los vencimientos de los próximos siete años, de manera que disminuya la presión del pago de deuda en los presupuestos del próximo gobierno.
Agregó que la transacción se realizó dada la coyuntura en el mercado para colocar deuda, ante la situación de alta liquidez y bajas tasas en el mundo y, asimismo, considerando la demanda existente para papeles peruanos.
De igual modo, refirió que la operación se hizo tomando en cuenta que el momento actual es oportuno para salir al mercado -pues en diciembre los mercados son más difíciles y cierran cerca de Navidad- y considerando que el próximo año es pre-electoral y el nuevo gobierno se tomará su tiempo para anunciar sus políticas de deuda.
Destacó también que la transacción se realizó utilizando el acceso al mercado que hoy tiene el Perú por su condición crediticia de "Grado de Inversión".