La moneda mayorista del país sudamericano perdía un 4,39%, a 38,40/38,70 por dólar, superado el mediodía de Buenos Aires. El peso viene de perder un 16,4% la última semana y de arrastrar un derrumbe del 25,9% en agosto.
Buenos Aires. El mercado financiero de Argentina caía el lunes por la desconfianza de los inversores a nuevas promesas del Gobierno de atacar el gasto público, en momentos que se abre otra negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para acceder a nueva financiación.
El Gobierno de Argentina aplicará un nuevo impuesto a las exportaciones y reducirá su déficit fiscal, tras una crisis cambiaria que minó la confianza en la tercera economía latinoamericana.
"Los anuncios están en línea a lo que se especulaba iba a suceder, pero el mercado reacciona mal porque quienes lo ejecutarán, son los mismos (funcionarios) que hasta ahora fracasaron. Por eso que la mayoría (de los inversores) no le cree al Gobierno", dijo un agente financiero de la banca privada.
El peso argentino perdía un 4,64%, a 38,40/38,80 por dólar, hacia las 14.00 hora de Buenos Aires (1700 GMT), aunque con recorte de volúmenes por un feriado en Estados Unidos, lo que hacía mantener inactivo al banco central, dijeron operadores.
La moneda mayorista viene de perder un 16,4% la última semana -cuando anotó su piso histórico de 42,00 unidades-, y de arrastrar un derrumbe del 25,9% en agosto, lo que profundizó la baja a casi un 50% en 2018.
El presidente argentino Mauricio Macri anunció a mitad de la semana pasada que se acordó un adelanto de fondos con el FMI para garantizar el financiamiento del país, en medio de temores a una potencial cesación de pagos de deuda. Sin embargo, tampoco sus palabras lograron tranquilidad.
Por su parte, el peso en la reducida franja marginal se depreciaba un 1,32%, a 37,50/38,00 por dólar, contra el mínimo récord indicativo de 40,00 unidades de este jueves previo, comentaron cambistas.
Para quitar más liquidez del sistema financiero y frenar la persistente demanda de dólares, el banco central elevó durante la semana previa a 60% la tasa de política monetaria e incrementó en cinco puntos porcentuales los encajes bancarios.
El índice Merval de Bolsas y Mercados Argentinos (BYMA) se acoplaba a la debilidad del mercado y perdía un 2,27%, a 28.627,61 puntos, luego de ganar casi un 9,5% este viernes como adelanto a las medidas oficiales.
"Los interrogantes siguen vigentes (...) Creemos que entramos en una fase de "wait and see" (esperar y mirar) en donde los activos financieros podrían estabilizarse por algunos días a la espera de novedades", dijo en un reporte la consultora Delphos Investment.
Agregó que "en este sentido, resulta sumamente importante monitorear el proceso de dolarización de 'stocks' y retiro de depósitos en dólares de los bancos. Estas dos cuestiones por parte de los individuos son un interrogante y podrían provocar nuevas complicaciones al programa anunciado en caso de profundizarse".
Los bonos extrabursátiles argentinos no registraban operaciones genuinas por el feriado estadounidense, y por ende, tampoco había referencias del riesgo país del banco JP.Morgan.
La agencia Standard & Poor's puso el viernes la perspectiva de la calificación crediticia de Argentina en revisión con implicancias negativas, desde estable, por el riesgo que corre la implementación de medidas de ajuste económico que permitan recuperar la confianza de los inversionistas.