Scotiabank explicó que la aceleración de la economía peruana se sustentaría en que se disiparán los choques de oferta en los sectores primarios.
El Producto Bruto Interno (PBI) del Perú alcanzaría en junio su mayor tasa de expansión del primer trimestre debido principalmente a la recuperación de los sectores primario, proyectó Scotiabank.
“Para junio proyectamos que el PBI registre su tasa de crecimiento mensual más alta del primer semestre del 2019”, indicó a través de su reporte semanal.
Explicó que la aceleración de la economía se sustentaría en que se disiparán los choques de oferta en los sectores primarios. “Asimismo habrá un efecto estadístico positivo, pues junio del 2018 fue el mes de menor crecimiento del PBI del año anterior (2,1%)”, apuntó.
Agregó que las proyecciones apuntan a que en junio el PBI podría expandirse por encima del 3%.
Mayo. El informe señaló que la actividad económica habría empezado a mostrar un repunte desde mayo, luego de haberse estancado de forma temporal en abril.
“En ese sentido, coincidimos con el Ministerio de Economía (MEF) en que el PBI de mayo sería mayor al de abril y que el resultado de junio sería superior al de mayo”, anotó.
Precisó que las razones para estimar una mejora en la actividad económica en mayo respecto a la de abril incluyen que el impacto negativo de la pesca de anchoveta sería menor.
“En mayo, la captura de anchoveta bordeó 1,1 millones de toneladas (-30%), caída menor al retroceso de 90% registrado en abril”, dijo.
Agregó que en mayo la producción de cobre de Las Bambas habría sido normal, a diferencia de los cerca de diez días de paralización en abril debido a las protestas sociales.
“Además hay un menor efecto estadístico adverso. El PBI de abril (7.9%) fue la tasa mensual más alta del 2018, mientras que la expansión de mayo del año pasado fue menor (6.7%). A ello se suma que no se registrará el efecto calendario (dos días de producción menos debido a Semana Santa)”, acotó.
Evolución en abril. Scotiabank explicó que la tasa de 0,02% registrada en abril, se sustentó en choques de oferta temporales en los sectores primarios.
Así, la menor cuota y el retraso en el inicio de la primera campaña de anchoveta afectó a la Pesca (-63.0%) y, de manera indirecta (a través de la menor producción de harina de pescado) a la Manufactura Primaria (-34.2%), restándole cerca de dos puntos porcentuales al crecimiento del mes.
Por su parte la paralización temporal de la producción de Las Bambas limitó el impacto positivo de la mayor producción de la mina Toquepala de Southern Perú tras su proceso de ampliación.
De otro lado, los sectores no primarios, con excepción de Construcción, mostraron una desaceleración debido al ya comentado efecto calendario.
Este efecto se hizo más visible en la Manufactura No Primaria (-3.20%) y, en menor medida, en los sectores Comercio (3.0%) y Servicios (3.8%).
En general, las actividades vinculadas al consumo han sido menos afectadas que las asociadas a la inversión.
Por último, la Construcción se vio beneficiada por un mayor consumo interno de cemento y un repunte de la inversión pública, aunque esta última no parece haberse consolidado del todo.