Muchas de las mayores plataformas de comercialización de criptomonedas han argumentado que aislar a toda una nación iría en contra de los principios del bitcoin de ofrecer acceso a pagos libres de supervisión estatal.
Algunas de las mayores plataformas de intercambio de criptomonedas del mundo no cerrarán sus puertas a Rusia, rompiendo filas con el sector financiero convencional en una decisión que, según diversos expertos, debilita los intentos de Occidente de aislar a Moscú tras su invasión de Ucrania.
Las sanciones occidentales, que pretenden asfixiar a la economía rusa y apartarla del sistema financiero mundial, han obligado a empresas y firmas financieras a interrumpir en masa sus actividades en el país.
Pero muchas de las mayores plataformas de comercialización de criptomonedas del mundo, como Binance y las estadounidenses Kraken y Coinbase, se han abstenido de prohibir la entrada de clientes rusos, a pesar de la petición del Gobierno ucraniano. Dijeron que examinarán a sus usuarios y bloquearán a los que sean objeto de sanciones.
Este choque ilustra el abismo ideológico entre el sector financiero tradicional y el mundo de las criptomonedas, cuyas raíces se encuentran en los ideales libertarios y la desconfianza en los Gobiernos.
Las plataformas de criptomonedas argumentaron que aislar a toda una nación iría en contra de los principios del bitcoin de ofrecer acceso a pagos libres de supervisión estatal.
Sin embargo, algunos especialistas en la lucha contra el lavado de dinero advirtieron que los mercados de criptodivisas podrían estar manteniendo una ruta abierta para que ciudadanos rusos muevan dinero en el extranjero, socavando así los esfuerzos occidentales para presionar a Rusia para que ponga fin a la guerra.
"No hay duda de que las sanciones se ven afectadas", dijo Ross Delston, abogado estadounidense y ex regulador bancario, quien añadió que las criptodivisas "permiten una vía de escape hacia la seguridad que no habría existido de otro modo".
Aunque la mayoría de las plataformas exigen controles de identidad, el rigor de las normas de "conocimiento del cliente" difiere en el sector, lo que preocupa a los reguladores, que ven en las criptomonedas un vehículo para el dinero ilícito.
Los expertos en antiblanqueo y en criptomonedas afirman que las personas afectadas por las sanciones pueden intentar mover fondos a través de las llamadas "monedas de privacidad", una clase de criptomonedas que oculta la identidad de los usuarios más que el bitcoin. Sus partidarios afirman que ofrecen a los usuarios una mayor protección frente a lo que consideran la vigilancia intrusiva de los Gobiernos.
Huida de rublos
Familias y empresas rusas se han apresurado a convertir rublos en moneda extranjera, después de que la moneda rusa alcanzara un mínimo histórico de 110 frente al dólar el miércoles.
También hay señales de un movimiento en masa de conversión de rublos en criptodivisas: el volumen de operaciones entre rublos y criptomonedas alcanzó los 15.300 millones de rublos (US$ 140,7 millones) el lunes, lo que triplica la cifra de la semana anterior, según el investigador CryptoCompare.
El aumento ha preocupado a los reguladores, y la Comisión Europea está estudiando si las criptomonedas se están utilizando para eludir las sanciones, según dijo el miércoles un responsable de la UE.
El Tesoro de Estados Unidos y el organismo de control del sector financiero de Reino Unido no respondieron a las solicitudes de comentarios de Reuters para este artículo.
La postura de las plataformas de criptomonedas va en contra de la de varias empresas de pago tradicionales y de tecnología financiera, que han respondido a las sanciones restringiendo sus servicios en Rusia.
La empresa de pagos Wise y el proveedor de transferencias de remesas Remitly, por ejemplo, han suspendido los servicios de transferencia de dinero en Rusia, mientras que Apple limitó el uso de su servicio Apple Pay.
Los gigantes estadounidenses de las tarjetas de pago Visa Inc y Mastercard también han bloqueado a varias empresas financieras rusas de sus redes.
Valores libertarios
El viceprimer ministro ucraniano, Mykhailo Fedorov, pidió el domingo a las plataformas de criptomonedas que bloqueen las direcciones de los monederos digitales de los usuarios rusos, una medida que acabaría con su capacidad de comerciar con criptomonedas.
El director ejecutivo de Kraken, Jesse Powell, dijo que no accederá a esta petición, calificando al bitcoin como la "encarnación de los valores libertarios".
Bloquear a los usuarios de todo un país "no castiga necesariamente a los verdaderos responsables, que pueden haberse preparado ya para la posibilidad de sanciones generales", dijo un portavoz de Kraken.
Kraken cumple con los requisitos legales y reglamentarios de todas las jurisdicciones en las que opera, añadieron.
Binance, la mayor plataforma de criptomonedas del mundo, también se negó a prohibir a todos los usuarios rusos, pero dice que está bloqueando las cuentas de cualquier cliente que sea objeto de sanciones. "Las criptomonedas fueron concebidas para proporcionar una mayor libertad financiera a las personas de todo el mundo", dijo el lunes.
Binance representa más del 40% de todas las operaciones de operaciones con criptomonedas en rublos, dijo CryptoCompare. Un portavoz de Binance se negó a comentar la cifra, o a dar detalles de los usuarios sancionados que ha bloqueado.
La plataforma de criptomonedas estadounidense Coinbase Global Inc también dijo que no impondrá una prohibición general de las transacciones con usuarios rusos, aunque bloqueará las cuentas de los afectados por las sanciones.
Sin embargo, seguir operando en Rusia puede suponer un riesgo para las propias plataformas, advirtió Joby Carpenter, especialista en criptomonedas y finanzas ilícitas de la Asociación de Especialistas Certificados en Antilavado de Dinero.
"Las plataformas y, en última instancia, los bancos en los que los criptoactivos salgan a flote tendrán que estar atentos para evitar infringir las sanciones o la legislación sobre terrorismo", dijo Carpenter