En las imágenes de la madrugada del 27 de febrero, se observa a la ex presidenta Michelle Bachelet recibiendo una serie de informaciones contradictorias sobre la posibilidad de un tsunami.
Santiago. Tras conocerse un video sobre la madrugada del 27 de febrero tras el terremoto de magnitud Richter de 8,8 que azotó a Chile, en el que se ve a la ex presidenta Michelle Bachelet encabezando una reunión de emergencia, en el que recibía una serie de informaciones contradictorias, la mayoría de la cuales resultaron ser erradas respecto a la ocurrencia de un tsunami, se ha generado una fuerte polémica.
Es que en la imagen se observa a la mandataria consultando sobre la posibilidad de un tsunami, y advirtiendo sobre la gravedad que significaría enviar mensaje errados a la población.
Sin embargo, asesores como la entonces directora de la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi), Carmen Fernández, señalaba que las informaciones decían que no había riesgo de maremoto, que de hecho ya se había registrado en varios lugares de la costa del centro sur chileno.
Asimismo, se ve a la presidenta molesta porque había pedido un helicóptero para evaluar en terreno la situación y tras cerca de dos horas, no había ningún aparato disponible. También pidió la presencia en el grupo de emergencia de un miembro de la Armada, pero se le explicó que quienes estaban en Santiago no tendrían más información disponible que la que ellos tenían en la Oficina Nacional de Emergencia.
Reacción de la Armada. Justamente en este contexto, el comandante en jefe de la Armada, Edmundo González, compareció ante la comisión investigadora del terremoto y tsunami de la Cámara de diputado, donde reconoció que el SHOA –dependiente de la institución- levantó apresuradamente la alerta de tsunami.
Sin embargo, también responsabilizó a la Onemi por una deficiente asesoría. “Si la Onemi hubiera activado el plan de protección nacional en su fase de evacuación, producto de la alerta que le dio el SHOA, creo que la situación habría sido totalmente distinta y habríamos tenido que lamentar menos muertes que las que lamentamos”, dijo.
Añadió que “la Onemi no tiene la atribución legal para evaluar una alerta que ha dado el SHOA, en cuanto a maremoto”, dijo La Nación.
A su juicio “el sistema de la alerta es complejo pero es un buen mecanismo, lo que nos falló fue que la Onemi decidió evaluar una alerta del SHOA, y no debieran haberlo hecho, y por otra parte tenemos un problema del SHOA que se anticipó demasiado en su cancelación”.
Respecto a la información que la ex presidenta Bachelet recibió esa madrugada, la calificó como ambigua y poco claro para la toma de decisiones.