Mario Correa, director de Estudios Económicos de Scotiabank, explicó a Excélsior que luego del alza de tasas de la Fed, se espera que el Banxico eleve su tasa de fondeo en al menos 25 o 50 puntos base, con el objetivo de anclar bien las expectativas de inflación.
Luego del aumento de la tasa de interés de la Reserva Federal de Estados Unidos en 25 puntos base, los especialistas esperan que el Banco de México haga lo propio y eleve su tasa objetivo en 25 o 50 puntos base, para llevarla a 5,50% o 5,75%.
Mario Correa, director de Estudios Económicos de Scotiabank, explicó a Excélsior que luego del alza de tasas de la Fed, se espera que el Banxico eleve su tasa de fondeo en al menos 25 o 50 puntos base, con el objetivo de anclar bien las expectativas de inflación.
"Yo creo que en los próximos meses vamos a ver una inflación en aumento y el riesgo es que las expectativas de mediano plazo se empiecen a ajustar también al alza de forma importante y para evitar ello, Banxico estaría aumentando la tasa”, enfatizó.
Comentó que el tipo de cambio subió un poco luego de la decisión de la Fed, pero la reacción fue moderada.
Yo creo que el mercado está esperando un incremento este jueves del Banco de México”, comentó.
En tanto, economistas de Banorte Ixe estimaron que el Banxico aumentará en 25 puntos base su tasa de referencia ubicándola en 5,50%.
"No obstante, no podemos descartar un alza de 50 puntos base, ante el probable deterioro en las expectativas inflacionarias generado por un mayor traspaso de la depreciación del tipo de cambio a los precios; y el potencial impacto del incremento en el salario mínimo sobre la dinámica de precios”, expresaron.
Sin sorpresas. En línea con el mercado, la Fed subió por primera vez en el año su tasa objetivo en 25 puntos a un rango de entre 0,50 y 0,75%, y estima aumentos adicionales de 75 puntos base en 2017. Esto contrasta con su previsión de septiembre pasado, cuando esperaban incrementos de 50 puntos para el próximo año.
La autoridad monetaria comentó que la economía ha mejorado lo suficiente para continuar con el proceso de normalización de la política monetaria, sobre todo existe una fortaleza significativa en el mercado laboral.
La Fed reiteró que este proceso seguirá llevándose a cabo de forma gradual. En esta ocasión, la decisión del aumento de tasa al interior del Comité, fue unánime.
En sus previsiones considerando la mediana, aumentan sus pronósticos para el crecimiento del PIB de 1,8% a 1.9% para 2016 y de 2% a 2,1% para 2017.
La tasa de desempleo la reducen de 4,6% a 4,5% para 2017 y la inflación la mantienen sin cambio en 1,9% para 2017.
El comunicado no hace mención a los planes económicos de la administración de Donald Trump, mismos que pudieran acelerar la inflación, lo que requeriría reacción en la política monetaria de los próximos años.
Bajo este contexto, la presidenta de la Reserva Federal, Janet Yellen, afirmó que la decisión de subir las tasas de interés es “un voto de confianza en el considerable progreso realizado por la economía del país”.
Expresó que “con una tasa de desempleo de 4.6% diría que el estímulo fiscal no es obviamente necesario para llevarnos al pleno empleo”, apuntó.
No obstante, Yellen precisó que “no estoy dando consejo al nuevo gobierno o al Congreso sobre cuál debe ser la política adecuada”.