El senador Eunicio Oliveira, líder en el Senado del díscolo Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), dijo a Reuters este domingo que Rousseff tomó un primer paso en esa dirección al reemplazar en el Ministerio de Hacienda a Joaquim Levy.
Un aliado clave de la presidenta brasileña Dilma Rousseff en el Congreso está seguro de que se podrá evitar la amenaza de un juicio político pero a cambio el partido exige un cambio radical en las políticas del gobierno para sacar a la economía de su declive más profundo en 25 años.
El senador Eunicio Oliveira, líder en el Senado del díscolo Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), dijo a Reuters este domingo que Rousseff tomó un primer paso en esa dirección al reemplazar en el Ministerio de Hacienda a Joaquim Levy, más preocupado por la austeridad fiscal, por el economista de izquierda Nelson Barbosa, quien tiene previsto aliviar el ajuste para alentar la expansión.
Levy se dio por vencido después de que Brasil perdió su grado de inversión la semana pasada.
Oliveira dijo que la posición de Rousseff había mejorado con unos fallos de la Corte Suprema del miércoles que dieron a la cámara alta la autoridad para rechazar el juicio político incluso si la cámara baja vota a favor de impugnarla.
"Una mayoría de los senadores del PMDB está a favor de que la presidenta termine su mandato", dijo Oliveira. "Lo que quieren es que ella cambie sus políticas económicas para hacer que el país vuelva a crecer".
Oliveira dijo que el caso de la oposición contra Rousseff no tiene fundamento legal y que difícilmente sea aprobado en el Senado, donde su coalición de gobierno tiene una sólida mayoría y la respaldará.
Sus comentarios son una clara señal de que los aliados de Rousseff en el moderado PMDB han perdido la paciencia con las políticas de austeridad que defendía Levy.