El núcleo duro industrial creció 2,1% en julio-setiembre luego de haber caído durante seis trimestre seguidos
Montevideo. El grueso del sector manufacturero registró en los tres meses cerrados a setiembre su primer incremento luego de seis trimestres de caída. Aun así, esta suba ocurrió en menos de la mitad de las ramas de la industria en un contexto en el cual la cantidad de horas de trabajo del sector continuó en retroceso.
Después de seis trimestres consecutivos de deterioro interanual en el volumen producido en el núcleo duro industrial, el penúltimo trimestre del año dio un respiro a la deprimida situación del sector y registró un aumento de 2,1% interanual en su producción, de acuerdo con los datos difundidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y procesados por la Unidad de Análisis Económico de El Observador.
El núcleo duro industrial deja de lado los cuatro grandes actores del sector manufacturero –la refinería de ANCAP, las plantas de celulosa de UPM y Montes del Plata y la planta de Pepsi en la zona franca de Colonia–, debido a que por su tamaño (en conjunto representan casi 25% de la actividad industrial) y su lógica particular (donde su evolución no acompaña necesariamente al resto del sector), distorsionan el análisis del grueso de las empresas.
El último registro de suba fue en los últimos tres meses de 2014. En el tercer trimestre de 2015 hubo una baja de 5,1%, mientras que en el segundo cuarto de este año la caída fue de 5,6%.
De todos modos, la suba de la producción del grueso industrial fue consecuencia de un incremento en el volumen físico de unos pocos sectores manufactureros. De los 19 sectores que considera el INE el incremento ocurrió en siete de ellos.
Sustancias y productos químicos fue el sector que tuvo el mayor incremento de producción, de 16% frente a igual trimestre del año pasado, seguido por productos metálicos, maquinaria y equipos (12%) y por madera y productos de madera (11,4%).
Los otros sectores que aumentaron la producción fueron el de derivado de petróleo y carbón, con una suba de 4,6%, mientras que en papel y sus derivados se incrementó 4,3%, y curtiembres y talleres de acabado aumentó 4,1%. En tanto, la producción de maquinaria –exceptuando eléctrica– se elevó 1,4% tras la drástica caída de un año atrás de 30,1% interanual.
Por otro lado, vehiculos automotores fue el sector donde la producción tuvo el mayor retroceso (78,1%), mientras que un escalón más abajo se ubicaron maquinarias y aparatos eléctricos (-33,2%) y muebles (-21,5%).
A su vez, en el rubro alimentos y bebidas, el principal sector de la industria uruguaya, la producción disminuyó 1,2%, acumulando un cuarto trimestre consecutivo de caída.
El aumento de la producción del grueso industrial no se tradujo a un incremento de la fuerza laboral.
En el periodo considerado la cantidad de horas trabajados cayó por trece trimestres consecutivos y tuvo una baja de 2,6% interanual. Aun así, la caída fue la menor desde igual periodo de 2014 y se viene desacelerando desde los últimos tres meses del año pasado. En el trimestre pasado la destrucción de trabajo fue de 4,5%.
En este caso, la reducción ocurrió en 14 de los 19 sectores comprendidos, con los minerales no metálicos a la cabeza, con una baja de 17,3%. Metálicas básicas e instrumentos médicos, ópticos y de precisión le siguieron con una caída de 14,7% y 13,1%, respectivamente.
En tanto, vehículos automotores fue el que tuvo el mayor incremento de trabajo, con un crecimiento de 24,3%.
El sector de alimentos y bebidas se mantuvo prácticamente sin cambios, con una imperceptible suba de 0,1% interanual.