Las divisas latinoamericanas han estado muy volátiles desde el comienzo del año, con un derrumbe en las primeras semanas de 2016 que fue seguido de una brusca recuperación. Los vaivenes se deben a los altibajos de los precios de las materias primas.
Buenos Aires. Los operadores de monedas de América Latina podrían recoger ganancias esta semana, luego de una apreciación en el mercado regional, que anticipó las protestas del domingo en Brasil y el encuentro monetario de la Reserva Federal de Estados Unidos que concluye el miércoles.
* Las divisas latinoamericanas han estado muy volátiles desde el comienzo del año, con un derrumbe en las primeras semanas de 2016 que fue seguido de una brusca recuperación. Los vaivenes se deben a los altibajos de los precios de las materias primas y a la intervención sorpresiva de los bancos centrales.
* El peso mexicano, que desde febrero ha venido ganando fuerza tras una serie de medidas cambiarias de las autoridades locales, buscaría consolidarse alrededor de las 17,60 unidades con los inversores atentos al desempeño de los precios internacionales del petróleo.
* En Brasil, el real cerró el viernes en 3,58 unidades por dólar por las expectativas de que se avance un proceso de impugnación de la presidenta Dilma Rousseff tras las protestas del domingo. "El mercado compró la idea de que el gobierno de Dilma no dura mucho más", dijo el operador Marcos Trabboldde la firma B&T.
* En Estados Unidos, se prevé que los funcionarios de la Fed mantengan sin cambios las tasas de interés y que reduzcan su perspectiva de posibles aumentos, a tres en 2016 comparado con los cuatro que anticiparon hasta ahora. Los inversores y operadores prevén que ajustarán las tasas una sola vez este año.
* En Chile, "el tipo de cambio ya retrocedió lo que se esperaba y ahora (...) el mercado ve en los actuales niveles de precio una oportunidad para recuperar los dólares vendidos hasta hace unos días", dijo un operador. El peso se movería entre 677 y 687 por dólar.
* En Argentina los operadores bancarios proyectan un rango de entre 14,80 y 15,30 pesos por dólar. Algunos inversores están vendiendo divisas para dirigir fondos hacia activos en pesos a 35 días que pagan tasas en torno al 38 por ciento anual.