El mes pasado, funcionarios de Puerto Rico propusieron reestructurar US$18.000 millones en deuda con vencimiento en los próximos cinco años, como parte de un plan amplio para sacar a la isla de la crisis financiera.
El Banco Gubernamental de Fomento de Puerto Rico (GDB) dijo este miércoles que las conversaciones con un grupo de acreedores de la isla terminaron "sin un acuerdo mutuamente aceptable".
El GDB, que es el principal agente fiscal del descapitalizado Estado libre asociado a Estados Unidos, dijo que no presionará para avanzar en una oferta de intercambio de su deuda, propuesta previamente con el llamado "Grupo Ad Hoc" de tenedores de bonos.
En vez de eso, el GDB dijo que ahora se enfocará en una oferta amplia de intercambio voluntario para todos los acreedores. La presidenta del GDB, Melba Acosta, dijo que el banco inició el proceso de firmar acuerdos de confidencialidad con varios acreedores.
Acosta afirmó que un ajuste voluntario de la deuda de Puerto Rico, que también permite la implementación de medidas propuestas en un reciente plan de revitalización económica, "es la mejor forma posible para maximizar las recuperaciones para los acreedores".
El mes pasado, funcionarios de Puerto Rico propusieron reestructurar US$18.000 millones en deuda con vencimiento en los próximos cinco años, como parte de un plan amplio para sacar a la isla de la crisis financiera.
En ese momento, se esperaba que las conversaciones avanzaran rápidamente, pero se estancaron en los últimos días.