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¿Qué deben decidir los líderes de la UE en cumbre sobre la crisis?
Domingo, Octubre 23, 2011 - 11:49

El siguiente es un resumen sobre lo que probablemente se decidirá este domingo y los temas que los líderes discutirán este miércoles, mientras intentan superar una crisis que ha causado estragos por casi dos años y que amenaza a la economía mundial.

Bruselas. Los jefes de Estado y de gobierno de los 17 países de la zona euro se reúnen en Bruselas este domingo para coordinar esfuerzos que permitan resolver los problemas de deuda de la región.

Se esperaba que la cumbre diera como resultado un amplio plan para hacer frente a la crisis, pero profundas diferencias entre Francia y Alemania en torno a la mejor manera de fortalecer el fondo de rescate de la zona euro los llevó a anunciar este jueves que no habría grandes avances este domingo y que otra reunión cumbre se realizará este miércoles para alcanzar un acuerdo.

El siguiente es un resumen sobre lo que probablemente se decidirá este domingo y los temas que los líderes discutirán este miércoles, mientras intentan superar una crisis que ha causado estragos por casi dos años y que amenaza a la economía mundial.

Recapitalización de bancos. Responsables de la Unión Europea dijeron este jueves a Reuters que todos los estados miembros de la UE están ahora de acuerdo en que se necesitan cerca de 100.000 millones de euros (US$135.000 millones) para fortalecer a los bancos europeos, protegerlos de la amenaza de una suspensión del pago de la deuda griega y de un posible contagio.

Inversores privados serán responsables de poner primero los fondos, pero si se demuestra que son insuficientes, deberán intervenir los gobiernos nacionales.

Sólo como último recurso, el instrumento de rescate, conocido como Fondo Europeo para la Estabilidad Financiera (FEEF), se utilizará para proveer fondos a los gobiernos para ayudarlos a apuntalar a los bancos.

La cumbre de este domingo, que comienza con un encuentro de todos los 27 jefes de Estado y de gobierno de la UE y será seguida por una reunión de los 17 líderes de la zona euro, debe acordar un marco de trabajo para la recapitalización de bancos, incluyendo una cifra más precisa sobre lo que se necesita y por cuánto tiempo deberán los bancos fortalecer sus hojas de balance.

Gobernanza económica y supervisión. Los líderes de la zona euro están de acuerdo en aplicar reglas más estrictas para mantener en orden sus finanzas nacionales, incluyendo multas para quienes violen el techo de endeudamiento del 60% del Producto Interno Bruto (PIB) y el límite de déficit presupuestario del 3% del PIB.

También se vigilarán de cerca los planes presupuestarios nacionales para una mejor coordinación de las políticas macroeconómicas a lo largo del bloque de la moneda común.

Algunas de las estructuras de toma de decisiones en la UE, entre ellas cómo manejar el Eurogrupo, que reúne a los ministros de Finanzas de la zona euro, serán alteradas. Habrá también dos cumbres anuales de la zona euro para que los líderes puedan trabajar más cercanamente en la coordinación económica.

Se espera que el encuentro de este domingo produzca un acuerdo definitivo sobre temas de gobernanza económica y supervisión fiscal, dejando los asuntos más espinosos y complicados para la otra cumbre del 26 de octubre.

Fondo europeo para la estabilidad financiera. El FEEF, creado el año pasado y utilizado hasta ahora para rescatar a Irlanda y Portugal, es un fondo de 440.000 millones de euros que se basa en garantías de todos los estados miembros de la zona euro y recauda capital en los mercados internacionales mediante la emisión de bonos. Su calificación crediticia es AAA.

Los mercados financieros no están convencidos de que el FEEF es lo bastante grande como para manejar problemas más profundos de deuda en Italia y España, y los líderes de la zona euro tratan de elaborar mecanismos para aumentar la capacidad del fondo sin incrementar las garantías que han colocado los gobiernos.

Francia quiere convertir al FEEF en un banco, a fin de que pueda obtener préstamos del Banco Central Europeo a bajas tasas de interés para otorgar préstamos a los países. Alemania y el BCE se oponen a esto.

Alemania favorece un esquema que involucre el uso de los fondos para suministrar garantías sobre una porción de alguna nueva deuda emitida en la zona euro.

Bajo el plan, si Italia y España emiten nueva deuda en una subasta, el FEEF podría garantizar un 20-30% de cualquier pérdida que puedan tener los inversionistas institucionales ante un posible default, una manera de tratar de crear confianza y convencer a los mercados financieros que es seguro comprar deuda de la zona euro.

No obstante, analistas advierten que el plan está lleno de peligros, en particular que los inversores se cambien a bonos garantizados en lugar de deuda que ya se negocia en el mercado secundario, donde el coste del préstamo probablemente será presionado al alza, la misma reacción que los líderes quieren evitar.

Hay desacuerdos tan enormes sobre cómo apalancar el FEEF que los líderes no van a avanzar sobre el tema el domingo y deberán retornar al asunto el miércoles.

Un fracaso en acordar medidas amplias encenderá en los mercados financieros la inquietud de que los líderes son incapaces de manejar la crisis, aumentando la presión sobre los mercados de deuda de Italia, España y de otros países,

El problema original: Greacia. Los líderes también intentarán alcanzar un acuerdo sobre un nuevo paquete de ayuda para Grecia, que ya está recibiendo 110.000 millones de euros de la UE y el Fondo Monetario Internacional.

El segundo paquete de rescate, originalmente previsto en 109.000 millones de euros, podría ahora ser mayor, según han indicado responsables de la UE, aunque no está claro qué tanto más.

Un acuerdo sobre el segundo rescate fue primero alcanzado el 21 de julio, cuando también se acordó que los acreedores del sector privado de Grecia recortarían voluntariamente el valor de sus tenencias de bonos en cerca de 21%, dando a Grecia un alivio de deuda de 50.000 millones de euros entre ahora y el 2014.

Sin embargo, ese acuerdo se ha desbaratado y tendrá que ser renegociado en las cumbres del domingo y el miércoles.

La expectativa es que el sector privado deberá absorber mayores pérdidas, con una amortización de hasta 60%, aunque eso seguiría llevando a una reducción total de la deuda griega de 50.000 millones de euros para el 2014 debido a la caída de valor en el mercado de deuda. El objetivo nuevamente es que el proceso sea voluntario.

Los bancos son renuentes a renegociar el acuerdo, que probablemente los lleve a registrar pérdidas mayores en sus libros.

El FMI es también un factor. Responsables dicen que el fondo está frustrado con el proceso voluntario del sector privado y quiere hacer cumplir una reducción del 60% de la deuda griega: un default directo.

Mientras que algunos expertos argumentan que pérdidas tan profundas para los tenedores de bonos pondrían fin a la incertidumbre en torno a un default que la mayoría ve como algo inevitable, la medida causaría pánico entre los dueños de bonos en Italia y España, exacerbando aún más la crisis de dos años.

Autores

Reuters