Los inversionistas están abandonándolos para optar por activos más seguros, como los bonos y el oro, movidos por preocupaciones sobre el crecimiento económico y la efectividad de las políticas de los bancos centrales.
Los mercados bursátiles del mundo se encuentran en su posición más frágil en años.
Los inversionistas están abandonándolos para optar por activos más seguros, como los bonos y el oro, movidos por preocupaciones sobre el crecimiento económico y la efectividad de las políticas de los bancos centrales.
Al mismo tiempo, el desplome de los precios del petróleo está provocando estragos en las economías de países productores de crudo, mermando aún más el crecimiento económico global.
Además de la caída de las acciones en Estados Unidos, los grandes índices bursátiles del mundo también han sido golpeados, pese a esfuerzos por parte del Banco de Japón y del Banco Central Europeo para apuntalar al crecimiento mediante tasas de interés más bajas.
A continuación, algunos de los temas clave que pesan sobre el mercado:
¿Cuál es la mayor razíón para la ola de ventas? El desplome en los mercados bursátiles, que comenzó a fines del año pasado, se ha profundizado mientras los bancos enfrentan las implicancias de tasas de interés negativas en partes de Europa y Japón y la reducción de la curva de rendimientos de los bonos del Tesoro de Estados Unidos.
"Uno de los nuevos temas en los mercados es que (el alivio cuantitativo) ha dañado a los bancos y que por lo tanto exacerba el ambiente de aversión al riesgo", comentó Steve Englander, director gerente y jefe global de estrategia cambiaria de G10 de Citigroup, en Nueva York.
Las tasas de interés negativas sobre depósitos de bancos centrales y de rendimientos de bonos gubernamentales minan la capacidad tradicional de los bancos a lucrar a partir de la diferencia entre costos del crédito y los retornos de los préstamos.
Bajo esa modalidad, los bancos deben pagar por colocar dinero en bancos centrales o comprar bonos gubernamentales de bajo rendimiento, al tiempo que siguen pagando tasas de depósitos a clientes para que no retiren su dinero.
Aunque la Reserva Federal ha evitado introducir tasas negativas sobre sus reservas, la presidenta de la entidad, Janet Yellen, dijo el jueves en un testimonio ante legisladores que la Fed considerará tasas de interés negativas si fuera necesario.
"No las sacaría de la mesa", sostuvo.
¿La energía es el problema?. Mayores niveles de producción de crudo en Estados Unidos gracias a la tecnología de fracturación hidráulica, junto a una sobreproducción de Arabia Saudita, contribuyeron a crear una sobreoferta global, lo que provocó una fuerte caída en los precios de los hidrocarburos y de otras materias primas desde inicios del año pasado.
El desplome de los precios del crudo, actualmente en 27 dólares por barril -mínimos en 13 años-, provocó fuertes contracciones en las economías de países productores y elevó los rendimientos de deuda corporativa, lo que llevó a defaults en el sector energético.
¿Cuál será la próxima decisión de la FED? Los mercados ya no esperan que la Reserva Federal siga adelante con el ritmo de alzas de tasas planeado originalmente.
Los mercados de futuros de las tasas de los fondos federales muestran que los operadores no esperan que la Fed suba los tipos hasta febrero de 2017. En algún momento del jueves, hasta veían la posibilidad de un recorte este año e inversores dijeron que parte del alza en los precios del oro fue por esa posibilidad.
Los movimientos de los futuros de las tasas estuvieron acompañados de una caída del diferencial entre los bonos a corto y largo plazo del Tesoro de Estados Unidos, que llegó a su nivel mínimo desde diciembre de 2007. El hecho de que el diferencial se aplane ha precedido a una recesión en el pasado.
La baja en el diferencial muestra que los inversores están menos confiados en el crecimiento económico.
Todavía hay pocas señales de que los inversores estén liquidando sus activos masivamente, una señal típica de que el mercado tocó fondo, dijo Alan Gayle, de RidgeWorth Investments en Atlanta.
"Todavía parecen enfocarse en puntos específicos, ya sea el crédito o el oro. Pero claramente el mercado está tomando un tono más defensivo y estamos viendo señales de capitulación", remarcó.
Incluso si el nivel de las liquidaciones decae, 2016 seguramente será un mal año para las acciones, dijo Mohannad Aama, de Beam Capital Management en Nueva York.
El índice S&P 500 ha caído aproximadamente un 10,3% en lo que va del año, mientras que el Nasdaq Composite se ha desplomado más de un 15% en este mismo periodo.