El gobierno federal de Brasil percibió 91.500 millones de reales (US$29.600 millones) en impuestos en mayo, un 4% menos que en igual mes del año pasado, descontando la inflación.
La recaudación tributaria de Brasil bajó en mayo, pese a la serie de alzas de impuestos de este año, dijo este jueves la oficina impositiva del país, lo que se suma a las señales de una recesión y complica los esfuerzos del Gobierno por subsanar un déficit presupuestario.
El gobierno federal de Brasil percibió 91.500 millones de reales (US$29.600 millones) en impuestos en mayo, un 4% menos que en igual mes del año pasado, descontando la inflación.
Economistas esperaban que la recaudación impositiva sumara 94.000 millones de reales en mayo, según la mediana de los pronósticos de 12 economistas consultados en un sondeo de Reuters.
El país recaudó 109.000 millones de reales en impuestos federales en abril, según la agencia.
El martes, el ministro de Hacienda de Brasil, Joaquim Levy, reconoció que una desaceleración económica ha reducido los ingresos fiscales, pero dijo que era muy temprano para discutir cambios a la principal meta de presupuesto del Gobierno para este año.
La mayoría de los economistas estima que el Gobierno incumplirá su meta de superávit presupuestario primario equivalente a un 1,1% del producto interno bruto (PIB).
El superávit primario, que excluye pagos de intereses, es seguido de cerca por las agencias de calificación, que han advertido de posibles rebajas en la nota de crédito de Brasil.
En los doce meses a abril, Brasil registró un déficit primario de 42.615 millones de reales, o el equivalente al 0,76% del PIB, la mayor brecha desde que comenzaron los registros en 2001.