La economía uruguaya experimentó el año pasado una fuerte desaceleración y habría crecido en torno al 2 por ciento, según estimaciones oficiales.
Montevideo. La recaudación impositiva de Uruguay aumentó un 0,8 por ciento en 2015, frente al año anterior, descontado el efecto inflacionario, según datos de la Dirección General Impositiva (DGI).
Se trata del menor crecimiento en términos reales desde el 2002 dejando los ingresos del organismo por tributos en el equivalente a 9.156 millones de dólares, detalla el informe que hoy recoge la prensa local.
"La tasa de crecimiento real de la recaudación privada para el año móvil cerrado en diciembre de 2015 se ubicó en 0,2 por ciento", informa la oficina estatal.
De cada 100 pesos recaudados por la DGI en 2015, 60,3 provinieron de impuestos al consumo, 31,3 de impuestos a la renta, 6,5 a impuestos a la propiedad y el resto de otros tributos y multas.
Los tributos al consumo retrajeron su recaudación en 0,9 por ciento en términos reales, mientras en el último semestre exhibieron tasas mayormente negativas.
La recaudación del IVA (Impuesto al Valor Agergado), que explica casi la mitad de los ingresos de la DGI, cayó un 2,3 por ciento real en relación al 2014.
La economía uruguaya experimentó el año pasado una fuerte desaceleración y habría crecido en torno al 2 por ciento, según estimaciones oficiales.
El retroceso de la recaudación impositiva provocó una suba del déficit fiscal hasta el 3,5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), un máximo desde 2002.