El consorcio argentino ISO pidió a la Dirección Nacional de Contrataciones Públicas (DNCP) reconsiderar su resolución 159/16, mediante la cual rechazó la denuncia de irregularidades presentada contra la adjudicación de Essap.

Asunción. ISO denunció el hecho en noviembre del año pasado, y Contrataciones dictaminó el 15 de enero.

El pedido de reconsideración presentó el consorcio argentino integrado por Aguas de Corrientes y Ginsa SA, el 25 de enero último, bajo patrocinio del abogado Paolo Pederzani.

Argumenta que la Empresa de Servicios Sanitarios del Paraguay (Essap) la descalificó porque confundió “la relación de cliente con órgano regulador”. Asegura que el sistema de gestión ofrecido a Essap no implementó Aguas de Corrientes, sino la firma Servicios Generales (SISA). “El sistema fue implementado por Aguas de Corrientes, siendo SISA la proveedora de los aspectos básicos del software. Tal como comprobaron los técnicos de la Essap durante su visita al local de la empresa”, explica.

El abogado Pederzani critica, asimismo, que Aqualogy haya presentado un certificado de provisión del software emitido por Aguas Andinas, componente del mismo grupo comercial.

La oferta de Aqualogy fue la tercera mejor propuesta (US$ 4.292.000); la segunda correspondió a ISO (US$ 2.750.000), y la primera a 5 de Setiembre (US$ 2.626.000). Estas dos últimas fueron descalificadas por la Essap.

La relación comercial entre el presidente Cartes y Luksic saltó a fines del 2013, a escasos cuatro meses de que asumiera la presidencia de la República.

Algunos diarios locales publicaron que el Grupo Luksic había adquirido el 50,5% de las acciones de Bebidas del Paraguay, propiedad del Presidente de la República.