Así lo sostuvo el Banco Ciudad, a través de su informe semanal, indicando que: “Ya se ha mostrado efectivo en alinear las expectativas del mercado con el objetivo planteado para este año”.

Buenos Aires. El régimen de metas de inflación que presentó esta semana el Banco Central de la República Argentina (BCRA) “ya se ha mostrado efectivo en alinear las expectativas del mercado con el objetivo planteado para este año”, sostuvo el Banco Ciudad, a través de su informe semanal.

Esta semana, el Banco Central, además de dar a conocer los detalles de la implementación del régimen, ratificó el sendero de metas de inflación comunicado hace unos meses.

Las expectativas de inflación para el último trimestre de 2016 "apuntan a una inflación núcleo que se ubicaría en 1,6%, 1,5% y 1,5% en los meses de octubre, noviembre y diciembre, es decir en línea con el objetivo del BCRA de alcanzar una inflación promedio de 1,5% en ese período", ratificó el Banco Ciudad.

En cuanto a las expectativas para 2017, "éstas se sitúan por el momento levemente por arriba de la banda superior planteada por el BCRA, lo cual ha llevado a la entidad a mantener invariable su tasa de política monetaria en la última licitación de Lebacs", añadió la entidad.

Para el Banco Ciudad, el avance de un esquema que tiene como objetivo promover la estabilidad económica a través de una baja sistemática y sostenible de la tasa de inflación “ya se ha mostrado” en el efecto de “alinear” las expectativas del mercado.

No obstante, “ello también se vincula con el crecimiento económico y los niveles de inequidad en la distribución del ingreso, ambos fuertemente comprometidos en contextos en los que la inflación se mantiene en niveles elevados en forma persistente”, señaló la entidad bancaria.

Los régimenes de metas de inflación "comenzaron a cobrar mayor protagonismo en las últimas tres décadas ante las deficiencias de otros esquemas de política monetaria", explicaron.

La entidad bancaria porteña señaló que el Banco Central "ya se encuentra conduciendo todos los instrumentos a su alcance para eliminar la "brecha de credibilidad", en una referencia implícita a la estabilidad de tasas y al sostenimiento de una política monetaria prudente en el corto plazo".

Estas medidas evidencian que "la lucha contra la inflación recién comienza", finalizó el informe.