"A mí me preocupa que la reactivación económica no alcanza a todos en Estados Unidos", afirmó el presidente del Comité, el demócrata Tim Johnson.
Washington. La Reserva Federal continuará reduciendo gradualmente su estímulo monetario al tiempo que procura determinar si la reciente debilidad de la economía se debe a un crudo invierno o a causas menos efímeras, dijo la presidenta del banco central estadounidense, Janet Yellen.
"El invierno extraordinariamente frío ha desempeñado un papel", afirmó Yellen durante su testimonio ante el Comité de Banca del Senado, dos semanas después de haber comparecido ante el Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes.
La primera mujer al frente de la Reserva Federal en un siglo de existencia de la institución, encontró poca simpatía entre los senadores demócratas, que son mayoría en la cámara alta, y abundantes críticas entre la minoría republicana.
"A mí me preocupa que la reactivación económica no alcanza a todos en Estados Unidos", afirmó el presidente del Comité, el demócrata Tim Johnson. "Son demasiadas las ciudades grandes y pequeñas en todo el país que no se han recuperado de la Gran Recesión y siguen bregando".
"El desempleo de largo plazo sigue en niveles históricamente altos", continuó Johnson. "La desigualdad de ingresos se torna más grave y más y más familias se ven empujadas afuera de la clase media".
Yellen reiteró que "la Reserva probablemente reducirá el ritmo de sus compras de activos en pasos mesurados durante las próximas reuniones".
En 2008 la Reserva Federal inició un programa de adquisiciones de bonos del Tesoro y títulos hipotecarios por US$85.000 millones mensuales, y en diciembre inició la reducción de esas compras, que ahora están en US$65.000 millones al mes.
Mike Crapo, el republicano de mayor rango en el Comité del Senado, dijo que la decisión de reducir las compras "es bienvenida por todos" los que discrepan con la política del banco central.
"Para cuando la Reserva deje de expandir su portafolio tendrá más de US$4 billones en bonos del Tesoro y títulos hipotecarios", advirtió Crapo, quien recordó que algunos expertos han calificado este exceso de reservas como "yesca sobre los libros contables del sistema bancario".
"La Reserva Federal deberá ser muy vigilante para asegurar que las herramientas que han identificado para manejar el retiro gradual sean suficientes para impedir trastornos en los mercados", agregó. "Estas políticas monetarias no convencionales han fracasado en la producción de los beneficios prometidos".
Yellen también reiteró el compromiso de la Reserva para mantener la tasa de interés de referencia por debajo del 0,25% en tanto el índice de desempleo se mantenga por encima del 6,5% y la inflación no exceda el 2,5%.
La vinculación entre el crédito barato y el índice de desempleo preocupó el mes pasado a los inversionistas cuando el Departamento de Trabajo informó que el desempleo, que había llegado al 10 % en octubre de 2009, ha bajado al 6,6%.
Los mercados financieros mostraron la aprensión de los inversionistas porque la Reserva, ante tal indicador, abandonara la tasa de interés baja que ha mantenido desde diciembre de 2008.
En cuanto a la inflación, medida por el índice de precios en gastos de consumo, un indicador al cual presta mucha atención la Reserva, fue del 1,1% anual en diciembre y ha estado por debajo de la meta de la Reserva desde mayo de 2012.
De todos modos, Yellen evitó hoy decir si la Reserva abandonará el umbral del índice de desempleo y señaló que el banco central no puede fijarse sólo en ese índice para evaluar la condición del mercado laboral.
"La recuperación en el mercado laboral está lejos de ser completa", sostuvo Yellen. "Mis colegas en el Comité de Mercado Abierto (de la Fed) y yo anticipamos que la actividad económica y el empleo se expandirán a ritmo moderado este año y el próximo, la tasa de desempleo seguirá bajando a un nivel sostenible a largo plazo, y la inflación retornará a alrededor del 2% en los próximos años".