En los últimos dos años ese descenso fue de US$5.130 millones, lo cual representa una disminución de 33%, según el reporte presentado por el BCB.
Las Reservas Internacionales Netas (RIN) de Bolivia continúan en caída, luego de que el pasado 20 de enero se ubicaron en US$9.993 millones, informó el Banco Central de Bolivia (BCB).
En los últimos dos años ese descenso fue de US$5.130 millones, lo cual representa una disminución de 33%, según el reporte presentado por el BCB.
El instituto emisor precisó que las RIN se ubicaron en US$15.123 millones en diciembre de 2014, para caer por debajo de los US$10.000 millones en los primeros 20 días de enero de 2017.
El BCB atribuyó la caída a menores ingresos en la exportación de gas, afectada por la baja del precio del barril de petróleo que se arrastra a más de dos años.
De igual forma justificó la caída al incremento en los requerimientos de transferencias al exterior por parte del sistema financiero, a un incremento del requerimiento de efectivo en dólares por parte del sistema financiero nacional y al déficit comercial.
Las RIN están compuestas por las reservas monetarias (84,3%) y las reservas de oro (15,7%).
Las reservas monetarias, por su parte, se dividen en tramo precautorio (57,4%) y tramo de inversión (26,9%).
El ex presidente del BCB, Juan Antonio Morales, dijo en contacto telefónico con Xinhua que "las RIN se incrementaron hasta 2014 principalmente por los mayores ingresos recibidos por las exportaciones de gas. A partir de 2015, dichos ingresos disminuyeron por la caída de los precios del petróleo y la balanza comercial deficitaria".
Consideró que el menor precio de las materias primas (gas y minerales) es una de las causas para que las divisas ingresen en menor cantidad al país, impactando de forma directa en las reservas.
"Entre los factores principales del descenso de las reservas son la caída en los precios del petróleo y de las materias primas, el deterioro del comercio exterior o lo que los economistas llaman el déficit en cuenta corriente y el ahorro interno insuficiente para financiar las inversiones del país", aseveró.
Insistió en que la caída severa en los precios del petróleo, que afecta al precio del gas natural boliviano que se exporta a Brasil y Argentina, afecta de manera significativa y prolongada en la disminución de las reservas internacionales.
Este panorama ya lo tenía previsto el gobierno, que a través del ministro de Economía Luis Arce, declaró el pasado 15 de enero que Bolivia continuará liderando en la región latinoamericana como uno de los países con mejores RIN respecto del Producto Interno Bruto (PIB), pese a sufrir en los dos últimos años un duro descenso de este indicador.
Además, dijo que el gobierno nacional ha tomado medidas preventivas y oportunas para preparar a Bolivia, antes de que la crisis internacional golpee la economía nacional.
Caídas millonarias. El economista y ex funcionario del BCB, Luis Ballivián, dijo en entrevista a Xinhua que, con base en los datos proporcionados por el banco emisor, el descenso ha significado una pérdida de 205 millones mensuales en los dos últimos años.
El experto admitió que Bolivia ha registrado un déficit en la balanza comercial que es normal, pero que afecta a las reservas.
Agregó que el 2016 fue un año sumamente dramático, no sólo para los indicadores económicos externos bolivianos, sino para muchos países que tuvieron tasas de crecimiento negativas muy profundas y pese a eso, Bolivia está creciendo.
Según la información del estatal Instituto Nacional de Estadística, la balanza comercial cerró con un déficit de US$1.213 millones.
Las exportaciones bolivianas bajaron hasta US$7.214 millones en 2016, 19% menos que en 2015, mientras que las ventas del sector hidrocarburos se contrajeron 46,8%.
A juicio de Ballivián, en la medida que el déficit en la cuenta corriente de la balanza de pagos persista, las RIN seguirán perdiendo valor.
El economista consideró que este año las RIN seguirán a la baja porque Bolivia debe continuar pagando intereses de los créditos externos, cumplir deudas, gastar en importaciones y encarar la baja del precio del petróleo.
No obstante, aclaró que se debe tener cuidado con la política fiscal, prestar atención al programa de inversiones, al déficit proyectado en el Presupuesto General que fija 7,8% del PIB, que también pueden impactar en las RIN.