Piñera, favorito del mercado y quien lidera las encuestas para las elecciones de noviembre por una amplia ventaja, enfatizó la importancia de un mayor dinamismo del mayor productor mundial de cobre, ya que cada punto de crecimiento adicional aporta US$700 millones de recaudación fiscal.
El ex mandatario chileno y candidato presidencial Sebastián Piñera se comprometió este miércoles a duplicar la tasa de crecimiento durante su gobierno si triunfa en los próximos comicios, apoyado en un repunte de la inversión y un posible ajuste en los impuestos de las empresas.
Piñera, favorito del mercado y quien lidera las encuestas para las elecciones de noviembre por una amplia ventaja, enfatizó la importancia de un mayor dinamismo del mayor productor mundial de cobre, ya que cada punto de crecimiento adicional aporta US$700 millones de recaudación fiscal.
"Nuestra principal meta es que Chile alcance un alto nivel de desarrollo humano (...) Nuestra misión es que al año 2025, Chile sea el primer país de Latinoamérica en superar el subdesarrollo", dijo Piñera durante la presentación del plan.
El ex mandatario conservador, que gobernó entre el 2010 y 2014, remarcó que el país minero perdió "el vuelo" en los últimos cuatro años, con una expansión en promedio del 1,8% y un ciclo de inversión que completará en ese período su peor desempeño en medio siglo.
La promesa ocurre luego de que previamente este mes el Gobierno estimó que la economía crecería un 3% en 2018, apoyada en un repunte en el precio del cobre, un mayor gasto público y mejores expectativas para el comercio global, una cifra que duplicaría la expansión de este año.
Además, Piñera fijó la meta de aumentar la tasa de inversión en 3 puntos porcentuales en su eventual gobierno, junto con duplicar la capacidad de creación de empleos y establecer incentivos para las pequeñas y medianas empresas.
Destacó que planea "simplificar" el sistema tributario y realizar ajustes a una reforma laboral, que han sido blanco de críticas de los empresarios tras los cambios impulsados por el gobierno de la socialista Michelle Bachelet y que el senador y candidato oficialista Alejandro Guillier busca profundizar.
Por ello, junto con buscar un sistema tributario más simple, Piñera dijo que empujará para reducir la tasa de impuesto de primera categoría (del 27% para las empresas en 2018) al promedio de la OCDE (24-25%).
Se va a buscar "que la tasa de impuestos del sector corporativo tienda a estar en el rango del promedio de los países de OCDE (...) es un proyecto que se aplicará de forma gradual y en la medida en que la disponibilidad fiscal y el crecimiento económico lo permitan", precisó Piñera.
Agregó que la actual tasa de impuesto a las personas continuará sin cambios en su eventual administración.
El exgobernante, dueño de una de las mayores fortunas del país, dijo que también se enfocará en converger gradualmente hacia un balance entre ingresos y gastos en un plazo de 6 a 8 años, para estabilizar y luego reducir los niveles de deuda pública en relación al PIB.
"Queremos recuperar el equilibrio estructural. No va a ser fácil. Nos estamos preparando para gobernar en tiempos difíciles", dijo Piñera, aludiendo a posibles sorpresas fiscales.