Representantes de los industriales y comerciantes del país coincidieron en que el aumento al precio de la gasolina y diesel genera aun más presión en los costos e inflación.
La Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) propuso un paquete de cinco medidas como un “blindaje productivo” para enfrentar los mayores costos del sector industrial de México derivados del aumento de los precios de las gasolinas, la depreciación de peso y el incremento en las tasas de interés.
“Los industriales del país reciben con inquietud esta noticia, pues estamos concluyendo un 2016 de nulo crecimiento en el conjunto de la industria mexicana; prevemos un panorama complicado para el 2017, y estas noticias vienen a reafirmar que será un año complicado para la industria mexicana”, dijo Manuel Herrera, presidente de la Concamin.
La primera medida de este blindaje productivo consiste en elevar el contenido nacional de los proyectos productivos de infraestructura con inversión y coinversión pública-privada.
Otra acción es incrementar el financiamiento y las garantías de la banca de desarrollo para el sector productivo nacional, con tasas preferenciales, a fin de mantener el flujo de inversiones orientadas al fortalecimiento del crecimiento económico. Un tercer punto consiste en elevar el contenido nacional de las compras del gobierno federal.
Adicionalmente, se requiere un agresivo esquema de mejora regulatoria que garantice una reducción de hasta 30% de los costos administrativos que las empresas enfrentan a nivel federal. Y, como un quinto elemento, el organismo planteó la firma de un acuerdo nacional por la preservación del empleo.
El martes la Secretaría de Hacienda publicó la metodología para la determinación de precios máximos de gasolinas y diesel, a la par de los precios máximos vigentes para enero del 2017, en donde se contempla un incremento de 14,2% para la gasolina Magna y de 20,1%para la gasolina Premium.
Herrera expresó la “preocupación” del sector industrial nacional ante el anuncio de los aumentos en los precios de las gasolinas a partir de los primeros días del 2017, porque vienen a generar más presión a los costos que enfrentan los productores de todos los sectores productivos del país.
Según el dirigente empresarial, para evitar una escalada de precios derivada del alza en los precios a los productores de prácticamente todos los sectores y regiones productivas del país, es preciso consolidar las fortalezas de nuestra economía y aprovechar de manera eficaz los instrumentos que aseguren el buen funcionamiento de los mercados.
Para la Concamin, esta medida de ajuste de precios en los combustibles debe ir emparejada con políticas de fomento productivo en todo el país que permitan garantizar el crecimiento económico en el mediano y largo plazos, sin comprometer las capacidades productivas del presente.
Concanaco pide revisión de fórmula. A su vez, Enrique Solana Sentíes, presidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicio y Turismo (Concanaco Servytur), manifestó que el alza en los combustibles representa un “duro golpe” para el bolsillo de las familias mexicanas.
“El incremento de hasta 20% en las gasolinas provocará un aumento en los precios de la canasta básica, dado que afecta a toda la cadena productiva y el mayor impacto será en el precio final, el cual recae sobre el consumidor, que verá reducida su capacidad de compra”, dijo.
El líder del comercio organizado sostuvo que la medida anunciada por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público también propiciará un efecto inflacionario que, de acuerdo con algunos analistas, podría ser de 4,7%.
Solana sostuvo que se tiene que revisar la fórmula para determinar los precios mínimos y máximos de las gasolinas, ya que si bien no es una de las más caras del mundo, sí representa un alto costo en comparación con el poder adquisitivo de la población.
Solana consideró que el gobierno debió implementar otras acciones, como atacar de fondo el robo a combustibles y la corrupción que se ha dado alrededor de ésta en todos los niveles y ámbitos de gobierno.
Continuar con bajos precios impactaría en las finanzas públicas: SHCP. Si el gobierno de México continuara administrando y fijando el precio de las gasolinas —como hasta ahora lo ha hecho— y siguiera sin permitir que éste se fije por las condiciones del mercado y de costo de los insumos, el impacto a finanzas públicas sería muy importante, afirmó José Antonio Meade, secretario de Hacienda.
Lo anterior lo aseguró tras explicar que México es el cuarto consumidor en el mundo per cápita de gasolinas, en donde a diario se consumen más o menos 190 millones de litros de gasolina, lo que al suponer que el gobierno brinde un apoyo de 1 peso por litro de gasolina consumido, significaría un apoyo económico diario de 190 millones de pesos.
“Es un precio que es imposible ya de administrar; un precio de tal magnitud, en un bien que se consume tanto en México, no lo puede administrar el gobierno porque acaba teniendo un impacto en las finanzas públicas. Lo que sucedió se decidió con el tiempo y no tiene que ver con la reforma energética; tiene que ver sobre todo con finanzas públicas y con una reflexión de costos”, afirmó el representante de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
José Antonio Meade informó que 1 de cada 5 pesos, históricos, de todo lo que México debe en requerimientos financieros del sector público, se explica por decisiones de mantener artificialmente bajo el precio de gasolina, cuando no se tenía la capacidad de hacerlo.
En entrevista televisiva, destacó que el precio de la gasolina (como un insumo de la industria nacional) continuará siendo competitiva, pues si se compara su costo en México con el del resto del mundo –aun después del ajuste- es un poco más caro que en Texas, y muy parecido a lo que cuesta en California; si se compara con el continente, está por abajo de lo que cuesta en cualquier país de Centroamérica”, afirmó.