Los empleadores estadounidenses crearon 162.000 puestos el mes pasado, dijo este viernes el reporte del Departamento de Trabajo, y la tasa de desocupación se mantuvo estable en 9,7% por tercer mes consecutivo.
Washington. Las nóminas no agrícolas en Estados Unidos, una medida clave de empleo y de la salud de la economía, subieron en marzo por tercera vez desde que partió la recesión a fines del 2007, gracias a que el sector privado aumento la contratación a su mayor ritmo en casi tres años.
Los empleadores estadounidenses crearon 162.000 puestos el mes pasado, dijo este viernes el reporte del Departamento de Trabajo, y la tasa de desocupación se mantuvo estable en 9,7% por tercer mes consecutivo.
Este fue el mayor incremento en la creación de empleos desde marzo del 2007, dado que los empleadores privados salieron a contratar más trabajadores de lo esperado, aunque la contratación temporal para el censo fue menor a la que el mercado proyectaba.
La cifra de enero fue revisada para mostrar que en ese mes se crearon 14.000 empleos, mientras que la de febrero fue ajustada para reflejar que sólo se perdieron 14.000 puestos de trabajo. Previamente, se había informado una cifra de 36.000 empleos eliminados en febrero.
Los analistas consultados por Reuters esperaban que las nóminas no agrícolas mostraran la creación de 190.000 nuevos puestos de trabajo en marzo y que la tasa de desempleo se mantuviera sin cambios.
La mediana de las proyecciones de los 20 economistas que tuvieron pronósticos más precisos de nóminas el año pasado predijeron que se crearían 200.000 empleos en el tercer mes del año.
Los futuros de acciones de Estados Unidos se elevaron ligeramente tras el dato, mientras que los precios de la deuda gubernamental bajaron y el dólar tocó máximos de siete meses contra el yen.
El mercado laboral ha estado rezagado de la recuperación económica tras la peor recesión en el país desde los años 1930, lo que ha significado un desafío político para el presidente Barack Obama.
El crecimiento del empleo es crítico para mantener viva la recuperación, que comenzó en el segundo semestre del 2009, una vez que se esfumen los estímulos gubernamentales y el impulso de la recuperación de los inventarios en las empresas.
"El aumento del empleo es la última pieza del rompecabezas. Necesitamos crecimiento de empleo y de ingresos laborales con el fin de tener una recuperación económica sostenible", dijo Zach Pandl, economista de Nomura Securities International en Nueva York.
Se eleva contratación privada. Unos 48.000 trabajadores temporales fueron contratados el mes pasado para el censo nacional, que se realiza cada década, mientras que las nóminas privadas saltaron en 123.000, la cifra más alta desde mayo del 2007. En febrero, las plantillas privadas subieron sólo en 8.000 puestos.
El mes pasado, el empleo también fue impulsado por un retroceso en las pérdidas de puestos estacionales. Desde diciembre del 2007, las nóminas se habían contraído todos los meses, excepto en noviembre pasado, enero y ahora en marzo.
El repunte en el empleo podría sacar algo de presión a Obama, que ha puesto la creación de empleo como la prioridad número uno de su gobierno. Desde el inicio de la crisis, se han perdido cerca de 8,2 millones de empleos.
Los analistas consideran que el estado del mercado laboral determinará el momento en que la Reserva Federal comenzará a subir las tasas de interés, que actualmente están cerca del cero por ciento.
El banco central se ha comprometido a mantener la tasa referencial sumamente baja por un periodo prolongado, debido a una inflación controlada y la probabilidad de que la recuperación sea sólo moderada.
Pese al brusco cambio de tendencia del empleo el mes pasado, la debilidad aún se mantiene.
Una medida amplia de desocupación, que incluye el número de trabajadores que se agrega marginalmente a la fuerza laboral y aquellos que trabajan por tiempo parcial debido a razones económicas, subió ligeramente al 16,9%, desde 16,8% en febrero.
Cerca del 44,1% de los trabajadores desempleados en marzo ha estado cesante por 27 semanas o más.
En el sector productivo, la industria manufacturera sumó 17.000 empleos en marzo y la construcción 15.000. Las nóminas en el sector servicios crecieron, ya que el empleo minorista subió en 14.900 puestos.
El empleo gubernamental aumentó en 39.000 plazas, lo que refleja la contratación temporal por el censo.
El promedio trabajado por semana de todos los empleados subió a 34 horas, desde 33,9 horas en febrero.