El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) acentuó que el estimular la inversión productiva da oportunidad de recuperar el poder adquisitivo, crear los empleos suficientes e incrementar la calidad de bienestar, redundará en una mayor capacidad de consumo.

Ciudad de México. El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) insistió en la necesidad de estimular al mercado interno para hacer frente a las políticas internacionales, sobre todo las medidas proteccionistas de Estados Unidos.

Señaló que si bien el mercado externo ha retomado fuerza como un factor de impulso de la economía, aumenta la posibilidad de que éste pueda volver a moderar su fuerza con la preocupación sobre la política comercial que siga instrumentado Estados Unidos.

Adivirtió que la incertidumbre sobre la supervivencia del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y los aranceles impuestos, como medida de protección, pueden afectar la dinámica exportadora de México, pues poco más de 80% de las ventas hacia el exterior se canaliza a la economía estadounidense.

De ahí la necesidad de fortalecer el mercado interno para sentar las bases de un crecimiento sólido y sostenido, apuntó el organismo del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).

Acentuó que el estimular la inversión productiva da oportunidad de recuperar el poder adquisitivo, crear los empleos suficientes para el país e incrementar la calidad de bienestar, lo cual redundará en una mayor capacidad de consumo de los hogares.

Explicó que el deterioro del poder adquisitivo por el repunte de la inflación, aunado al mayor costo del financiamiento, se refleja en la evolución de indicadores como el de las ventas al menudeo y del sector servicios.

En ambos casos se aprecia un tendencia a la baja a partir de 2017 y, aunque hubo une leve mejoría en meses recientes, el ritmo de crecimiento de los precios al consumidor tardará más de lo esperarado en reducirse, acotó.

Subrayó que lo anterior podría conducir a una mayor cautela entre los consumidores, como ya ocurre en la venta de autos que reporta 12 meses consecutivos con variaciones negativas.