A 2018, el Gobierno busca crear cerca de 2,5 millones de nuevos puestos de trabajo.
La reducción de la tasa de desempleo a niveles del 7,5% y la creación de 2,5 millones de puestos de trabajo durante el próximo cuatrienio serán algunas de las tareas del presidente Juan Manuel Santos en su segundo tiempo de gobierno y por supuesto de su nuevo ministro de Trabajo, Luis Eduardo Garzón.
El panorama actual, según las cifras oficiales, muestra un país en el que la tasa de desocupación para el trimestre móvil abril-junio de este año fue de 9% (esto se traduce en 2,11 millones de personas sin trabajo) y en el que recientemente sectores como la construcción han sido protagonistas de una mejor dinámica del mercado laboral.
“Durante la primera mitad del año (2014) la tasa de desempleo continuó descendiendo, siguiendo con la tendencia que se viene observando desde hace algunos años. Dicho comportamiento obedece al crecimiento de la demanda de trabajo, representada por la tasa de ocupación, la cual ha aumentado más que la oferta”, explica un reciente informe del Banco de la República, según el cual, al renglón de la construcción como generador de empleo se suman servicios y comercio.
Frente a los planes del Ejecutivo, José Manuel Restrepo, rector del Colegio de Estudios Superiores de Administración (CESA), manifestó que la tasa de desempleo de largo plazo para Colombia es del 8,5% y señaló que para reducirla a los niveles estimados por el Gobierno deben ponerse en marcha medidas laborales estructurales que estén atadas a la construcción de las concesiones viales de cuarta generación (4G) y por supuesto a la consolidación del posconflicto. “El Informe Nacional de Competitividad mostró que Colombia tiene un costo laboral excesivo. Eso la hace menos competitiva”.
“Al analizar las cifras del mercado laboral, la gente ha dejado de buscar puesto. La generación de empleo es mucho menor”, resaltó Stefano Farné, director del Observatorio del Mercado de Trabajo y Seguridad Social de la Universidad Externado de Colombia, quien cree que una meta del 7,5% en materia de desocupación para 2018 por parte del Gobierno es todavía muy baja frente a la situación real.
Asimismo, el académico resaltó que una cifra de 2,5 millones de nuevos empleos para este cuatrienio aún es corta, ya que la población en edad de trabajar es mucho mayor (según el DANE, son 36,76 millones de ciudadanos para el trimestre móvil abril-junio de 2014).
Y además de procurar la reducción de la desocupación, el ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría, manifestó que en los próximos cuatro años el Gobierno estará concentrado en que la pobreza extrema —que está en niveles del 9%—, se reduzca a una tasa del 5%.
A lo anterior se suma el objetivo del Gobierno de procurar aumentar el ingreso per cápita anual hacia 2018. Por ahora, explicó Cárdenas, un habitante recibe US$8.300 en promedio y la meta es que ese monto aumente a US$11.200.