Si bien no hubo un corte repentino de los flujos de capitales como en crisis del pasado, el dinero está saliendo constantemente de las economías emergentes.
Brasilia/Bengalaru. Las monedas de mercados emergentes seguirán cayendo en los próximos meses por los temores de los inversores sobre la desaceleración económica mundial y su búsqueda de activos de refugio seguro, mostró el miércoles un sondeo de Reuters.
Las proyecciones para las monedas como el real brasileño, la lira turca y el rand sudafricano sugirieron que el dólar probablemente marque nuevos máximos contra las principales monedas emergentes, pese a las dudas de la Reserva Federal sobre el momento en que subirá su tasa de interés desde el nivel actual cercano al cero por ciento.
Todavía no se sabe cuándo es que la Fed eventualmente gatillará el ajuste monetario. Los mercados actualmente descuentan una probabilidad de más de 50% de un aumento solo para marzo del próximo año, mientras que una mayoría de economistas todavía predice que será en diciembre.
Aún así, la esquiva primera subida de tasas, cuando llegue, probablemente impulsará al dólar todavía más hacia arriba.
Los estrategas han estado anticipando una depreciación adicional de las monedas de mercados emergentes por meses. Pero la profundidad de la caída en semanas recientes sorprendió a muchos.
El real brasileño, por ejemplo, ha perdido 57% en el último año y probablemente se debilite 8% más desde su cierre del 6 de octubre, a 4,15 por dólar en doce meses, de acuerdo con la mediana de unas 30 estimaciones en el sondeo.
Según la mediana de las proyecciones en el sondeo, el rand se debilitaría 4% desde el cierre del martes a 14,00 en doce meses. La lira turca caería 7 por ciento a 3,15 por dólar mientras que el peso mexicano contrarrestaría la tendencia para fortalecerse casi 2% a 16,36 por dólar.
Si bien no hubo un corte repentino de los flujos de capitales como en crisis del pasado, el dinero está saliendo constantemente de las economías emergentes. Este será el primer año de salidas netas desde 1988, de acuerdo con un reporte reciente del Instituto de Finanzas Internacionales.