Las arcas públicas españolas enfrentan un horizonte menos turbulento de financiación en el tercer trimestre, después de que las autoridades alejaran las dudas sobre la capacidad del Estado de afrontar su alto volumen de vencimientos.

Madrid. El Tesoro Público español detalló este viernes su calendario de emisiones de deuda previstas para el tercer trimestre del 2010 y anunció que en ese periodo colocará un bono de referencia a 10 años mediante una sindicación.

Las arcas públicas enfrentan un horizonte menos turbulento de financiación en el tercer trimestre, después de que el Ministerio de Economía y Hacienda alejara este jueves las dudas sobre la capacidad del Estado de afrontar su alto volumen de vencimientos de julio, por unos 24.000 millones de euros.

Adicionalmente, el hecho de que Banco Santander haya sido declarado como el banco europeo más solvente tras las pruebas de resistencia, también disipaba nubarrones al sistema financiero español.

El Tesoro añadió el viernes que el 1 de julio emitirá bonos a cinco años con un cupón del 3,0%.

La última subasta de bonos a cinco años de esta referencia se celebró el 6 de mayo con un tipo marginal del 3,580%.

Además, el 15 de julio emitirá obligaciones a 15 años con un cupón del 4,65%. La anterior emisión de un papel con este plazo se llevó a cabo el 22 de abril, cuando se fijó un tipo marginal de 4,444%.

El 5 de agosto, la tesorería emitirá bonos a tres años con un cupón del 2,50%. La anterior ocurrió el 10 de junio, con un tipo marginal del 3,394%.

El 2 de septiembre, el Tesoro también emitirá la misma referencia a cinco años anunciada para julio y el 16 de septiembre subastará obligaciones a 30 años con un cupón del 4,70%.

La última emisión de estas obligaciones se llevó a cabo el 17 de junio, cuando se fijó un tipo marginal del 5,937%.

En esta semana, el Tesoro Público español ha colocado un total de 8.500 millones de euros en sus subastas de letras a 12 y 18 meses, y en bonos a 10 y 30 años.

Los fuertes volúmenes solicitados, muy por encima de los objetivos máximos establecidos, también han tranquilizado los ánimos al constatar el interés del mercado por la deuda pública española, según operadores.