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Turbulencias 2015: ¿Brasil y Sudáfrica dejaran de honrar las deudas recurriendo al impago?
Miércoles, Octubre 21, 2015 - 12:38

En esta entrevista, Franklin Allen, profesor de Finanzas de Wharton, señala que los mercados de divisas y de crédito continuarán siendo los mejores indicadores de la salud económica de ambos países.

Universia Knowledge Wharton. La desaceleración económica en China ya ha repercutido en las economías de los países proveedores de materias primas y otros insumos, sobre todo en los mercados emergentes. Para algunos analistas, ésta sería ahora la principal preocupación de los inversores: que Brasil y Sudáfrica dejaran de honrar las deudas recurriendo al impago. Sin embargo, Franklin Allen, profesor de Finanzas de Wharton, dice que no cree en la posibilidad de impago de estos países. Aunque la desaceleración de la economía china, sin duda, haya dado lugar a una menor demanda de productos básicos exportados por ambas naciones, “yo creo que sobre todo Brasil -pero también, en cierta medida, Sudáfrica- tiene otros problemas”, especialmente de corrupción.

En esta entrevista, Allen señala que los mercados de divisas y de crédito continuarán siendo los mejores indicadores de la salud económica de ambos países. En general, también se ve la “probabilidad significativa, pero no decisiva” de una crisis financiera global de algún tipo como consecuencia de la desaceleración económica mundial y los problemas de ajustes que pueden salir a relucir cuando la Fed comience a subir las tasas de interés, muy probablemente a finales de año.

Mientras tanto, Christine Lagarde, gerente del Fondo Monetario Internacional, dijo la semana pasada que los países de mercados emergentes (y mercados de renta fija) esperan un aumento del número de quiebras de empresas cuando la Fed eleve las tasas. El FMI aconsejó a la Fed incrementarlos en 2016. Al mismo tiempo, el Instituto de Finanzas Internacionales dijo que los mercados emergentes tuvieron la mayor desinversión de activos desde el año 2008 -en torno a US$40 mil millones- durante el tercer trimestre.

A continuación, la versión editada de la entrevista.

-Brasil es, probablemente, la mejor prueba de cómo los mercados emergentes se están viendo afectados por China y la desaceleración económica mundial. El real se depreció más de 30% este año frente al dólar. Los inversores están apostando cada vez más por la posibilidad de que Brasil y Sudáfrica consideren el impago de sus deudas. El rand sudafricano se depreció 15%. Se pensaba que los mercados emergentes eran la nueva locomotora económica que tiraba de otras economías, tal vez como EE.UU. lo ha hecho durante décadas. ¿Qué cree que está pasando?

-Creo que Brasil, en particular, pero también, en cierta medida, Sudáfrica, tiene muchos otros problemas más allá de los que estamos hablando. Los departamentos de recursos humanos gestionan el recurso más preciado de los negocios: la gente. Sin embargo, muchos todavía utilizan sistemas obsoletos que introducen ineficiencias. La simplificación de los negocios sería un paso adelante.

En Brasil, está el tema de la corrupción. El ministro de Hacienda, que debe poner las finanzas del país en orden y actuar con fuerza, no parece contar con el apoyo total de su gabinete. La presidenta Dilma Rousseff está muy debilitada, su índice de aprobación ha caído hasta 8%, si no recuerdo mal, uno de los más bajos jamás registrados en el país.

El gobierno quiere cobrar impuestos a las transacciones financieras para tapar el agujero del déficit, pero la presidente no consiguió que su plan fuese aprobado, por lo que ya se está considerando la posibilidad de un déficit del 8% al 10% al año, más o menos. Esto en un país con niveles muy altos de deuda. Creo que del 60% al 70% [ … ] en un año si el agujero no se cubriera. El país paga 7% de tasas de interés reales sobre la mayor parte de su deuda. Es una situación de gran inestabilidad. No creo que Brasil declare el impago, pero hoy en día esto es una posibilidad, y es algo que preocupa a los inversores, por eso están sacando su dinero del país. Las cosas no van bien.

Es de esperar que el gobierno apruebe otro tipo de impuestos, cubriendo el déficit y saneando las finanzas públicas, pero todavía falta mucho para que esto ocurra. Por si fuera poco, hay algunos problemas en todo el mundo. Así que si usted tiene inversiones en Brasil hoy -y parece que EE.UU. elevará las tasas de interés- me parece que éste es el momento de tomar el dinero de su país antes de que el tipo de cambio caiga en picado. La inversión en EE.UU. proporcionará un mejor retorno.

Creo que, en general, eso es lo que está pasando. En cuanto a la economía real, la desaceleración de China no es, obviamente, algo bueno para Brasil. Es una pregunta interesante saber cuánto de todo esto está detrás de los problemas actuales en lugar de los propios problemas del país, es decir, los escándalos de corrupción y escándalos políticos, etc. La situación en Sudáfrica es algo similar.

No hablamos de India, pero India es un rayo de luz. El país todavía parece estar creciendo a tasas razonables, pero la economía de la India no es tan grande. La población es inmensa, pero el país no es una gran economía en general. Es muy complicado el hecho de que gran parte del crecimiento se debiera a los países de los mercados emergentes, porque ahora ya no tenemos el mismo nivel de crecimiento, al menos no en los próximos años.

-Si las cosas se ponen aún más fuera de control en Brasil o Sudáfrica, por ejemplo, respecto a los valores predeterminados y similares, ¿cuáles serían las señales de advertencia que merecen nuestra atención? Si hay impago de uno o de otro, ¿qué puede pasar?

-Las monedas son probablemente el mejor indicador. El rendimiento de la deuda, de la deuda pública, es posiblemente un indicador menos fiable porque el gobierno -si hay bancos controlados por él- puede hacer que estos bancos los compren, etc. En cuanto a la tasa de cambio, lo que tenemos es lo siguiente: indicios de que hay problemas en estos países. Si hay impago en Brasil o Sudáfrica, las economías de ambos se verían seriamente afectadas. Yo no estoy tan seguro de que fuera un problema para el resto del mundo. Pero nunca se sabe. Tal vez la gente no cuente con esta posibilidad, pero deberían. Si esto ocurre, esperemos que no sea algo muy perjudicial para la economía del resto del mundo.

-¿Diría que, en general, la economía mundial parece estar desacelerándose, pero aún así conseguiría evitar posibles grandes crisis financieras? ¿Cuál es su evaluación de una posible crisis financiera grave ahora?

-Creo que hay una posibilidad significativa, pero quizás no muy seria, de que eso ocurra. Creo que la otra gran cuestión tiene que ver con la flexibilización monetaria en EE.UU. y el abandono de este instrumento por parte del gobierno. No se sabe exactamente cómo será, qué dimensión tendrá, al igual que los ajustes. Creo que no sabemos muy bien cómo van a desarrollarse las cosas. Vamos a tener una mejor idea en el momento en que comencemos a ver aumentos en las tasas de interés en Estados Unidos y la velocidad a la que esto ocurra.

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Universia Knowledge Wharton