Consultados por el desempeño de su empresa propia, por tercer mes consecutivo el 10% de los empresarios son optimistas en relación al futuro cercano.

El enfriamiento de la economía doméstica, sumado a la difícil situación que enfrentan los principales mercados de destino de la producción manufacturera, inciden negativamente en la percepción de los empresarios de la industria respecto a la evolución para los próximos meses de las principales variables que afectan al sector. En particular, para la actividad económica en su conjunto, las expectativas industriales se encuentran en su nivel más bajo en seis años, en valores similares a los que mantenían a fines de 2002.

De acuerdo al informe Evolución de las expectativas industriales, divulgado por la Dirección de Estudios Económicos de la Cámara de Industrias (CIU), las expectativas de los empresarios industriales en relación a la economía uruguaya y al desempeño de las empresas descendieron significativamente durante el último año.

Así, el indicador de expectativas empresariales –que considera la diferencia entre las respuestas optimistas y las pesimistas– se fue deteriorando como consecuencia de un aumento en el número de empresarios con una visión negativa. El indicador va desde -100%, todas las respuestas pesimista; a 100%, todas las respuestas optimistas, pasando por 0% –igual número de optimistas que de pesimistas–.

Mientras que en junio del año pasado el 26% de los encuestados esperaban que la economía empeorara en el próximo semestre (-26%), en el mismo periodo de este año la cifra empeoró (-41%), el mayor valor desde mayo de 2009. Como contraparte, la confianza de los industriales hacia una mejora económica se fue deteriorando. Solamente el 2% de los consultados se mostraron optimistas, la menor cantidad de respuestas positivas desde el período de crisis –octubre de 2002–. En junio del año pasado, la cifra alcanzó el 6%. En tanto, la mitad del empresariado industrial mantiene una visión neutra en relación al corto plazo y consideran que el desempeño económico del país continuará sin cambios.

Consultados por el desempeño de su empresa propia, por tercer mes consecutivo el 10% de los empresarios son optimistas en relación al futuro cercano. Los que opinan lo contrario ascendió al 30%, más de 10 puntos porcentuales por encima del registro de junio de 2014 (19%).

Respecto a las expectativas en relación a las exportaciones, las perspectivas empeoraron. La cantidad de empresarios que proyectan una mejora en el desempeño exportador se redujo un punto porcentual, pasando de 14% en mayo a 13% durante los últimos 12 meses relevados, mientras que los que esperan que las exportaciones continúen mostrando un mal desempeño se incrementó 5 puntos porcentuales a 26%.

También se registró un deterioro en las expectativas de ventas al mercado interno. Mientras que el porcentaje de optimistas se redujo de 18% a 15% entre junio del año pasado e igual mes de este año, los pesimistas pasaron de 19% a 28%, su nivel más alto desde junio de 2009.

Según los técnicos a cargo del informe, "las expectativas de los empresarios aproximan, con cierto adelanto, los patrones de comportamiento de la producción manufacturera".