El diputado de Primero Justicia Juan Carlos Caldera, partido que impulsó la propuesta de Ley, asegura que según las cifras de desempleo la tasa más alta está en el sector joven. La razón de esto es que cuando alguien sale a la calle a buscar trabajo le piden experiencia.
La Ley del primer empleo busca "romper el círculo vicioso" que condiciona el empleo a la experiencia adquirida. Los asambleístas de las diferentes toldas opositoras aseguran que darán el debate en la AN y en la calle.
El diputado de Primero Justicia Juan Carlos Caldera, partido que impulsó la propuesta de Ley, asegura que según las cifras de desempleo la tasa más alta está en el sector joven. La razón de esto es que cuando alguien sale a la calle a buscar trabajo le piden experiencia.
La idea que plantean es una relación Estado-empresa privada-jóvenes, mediante un mecanismo de incentivo a las empresas que creen nuevos puestos de trabajo. "Aumentar la nómina, eso permitirá aumentar su productividad, abriendo la oportunidad a personas sin experiencia para que aprendan, a cambio esa empresa recibe un beneficio fiscal", dijo Caldera.
Estas nuevas plazas deben ser empleos formales con todos sus beneficios y salario digno.
El diputado considera que la discusión debe darse sobre "cómo hacemos eficiente el recurso petrolero, que éste vaya al bolsillo del venezolano, y no se quede en el camino del proselitismo político".
La ayuda del sector privado es primordial. El parlamentario alerta sobre el hecho de que "no existe modelo productivo que no tenga una fuerte participación del sector privado".
El diputado por Un Nuevo Tiempo (UNT) Enrique Márquez, señala que la posibilidad de garantizar un empleo formal, que no sea una beca o dádiva, es primordial.
Pero dice que el adelanto de opinión del Gobierno, cuando el presidente Chávez en un acto de graduación de licenciados dijo que el Estado no puede emplearlos a todos, pues "el presupuesto no soporta eso", es una manera de decir que no está abierto a aceptar una buena idea que incluso pudiera ayudarle (al Gobierno) a elevar su perfil político. Y esto bajo una excusa como el presupuesto.
"El presupuesto de 2011 fue hecho con un barril de petróleo a US$40 y ya está por US$100. Hay un diferencial holgado para poder dar financiamiento a este programa".
Al respecto el diputado independiente Eduardo Gómez Sigala señala que todo lo que signifique creación y promoción de empleo, debe trabajarse y apoyarse. Pues asegura que las propuestas de seguridad social se podrán atender en la medida en que se tenga un sector productivo que crezca y genere empleo.
"Ya vemos cuál es la situación en el sector público, donde no se firman contratos colectivos, es ahí donde está la mayor pérdida del poder adquisitivo. Si no incentivamos la creación de empleos en el sector privado pues no tendremos salida".
Gómez Sigala dice que esta no puede ser una política aislada. La promoción del primer empleo debe ser un "proyecto de país", pero aclara que no puede ser impuesto, sino un diálogo que debe plantearse en el país.
Uno entre el sector productivo-trabajo-Gobierno. "Ese día diseñaremos estrategias, de lo contrario medidas impuestas o unilaterales no van a solucionar nada".
A su juicio, el diálogo no lo abrirá el Gobierno voluntariamente "sino que será producto de la inestabilidad que el país está teniendo como consecuencia de una política económica equivocada, en la medida que reclamen se abrirán los espacios para ese debate", dice el diputado.
Considera que todas las leyes se pueden debatir y el único camino es el avance por medio de los acuerdos políticos y el diálogo. Alerta sobre la demora de la Comisión Consultiva en reunirse y definir las prioridades de la Agenda Legislativa de 2011.