Los nuevos proyectos crecieron un 70%, mientras que las ventas subieron un 1,4% en agosto en una base anual, dijeron este martes el centro de estudios Fipe y el grupo de la industria Abrainc en un comunicado conjunto.
Sao Paulo. Las ventas y entregas de casas en Brasil subieron en agosto por primera vez en 13 meses, una señal incipiente de que los efectos de una dura recesión, una restricción del crédito y la debilidad de la confianza entre los posibles compradores de viviendas están empezando a disiparse.
Los nuevos proyectos crecieron un 70%, mientras que las ventas subieron un 1,4% en agosto en una base anual, dijeron este martes el centro de estudios Fipe y el grupo de la industria Abrainc en un comunicado conjunto.
Las entregas se incrementaron casi un 14%, pese a que las cancelaciones aumentaron un 2,8% interanual.
Si bien los resultados reflejan una mejoría subyacente de las condiciones macroeconómicas, puede ser demasiado pronto para evaluar si la demanda por viviendas está mejorando, afirmaron Fipe y Abrainc.
La oferta de casas nuevas a fines de agosto era suficiente para satisfacer la demanda por otros 13 meses si no se iniciaran nuevos proyectos, observó el reporte.
Un índice que agrupa a las empresas de construcción e inmobiliarias de Brasil que cotizan en la Bolsa de Valores de São Paulo ha subido casi un 4% en los últimos tres meses por expectativas de que una caída de cuatro años del sector finalmente haya tocado fondo.
El indicador de actividad de construcción de casas de Abrainc-Fipe, que se actualiza en forma mensual, es un indicador muy seguido en Brasil sobre el panorama para el mercado inmobiliario.