El amplio índice de acciones estadounidenses S&P 500 soportó enormes oscilaciones diarias, pero un año de infortunios dejó al índice casi en donde empezó. Perdió apenas un 0,003%.

Nueva York. Para el mercado bursátil de Estados Unidos, el 2011 fue un camino largo y ajetreado hacia ninguna parte.

El amplio índice de acciones estadounidenses S&P 500 soportó enormes oscilaciones diarias, pero un año de infortunios dejó al índice casi en donde empezó. Perdió apenas un 0,003%, en lo más cerca que estuvo de cerrar casi sin cambios desde 1947, de acuerdo a Standard & Poor's.

Los mercados globales han sido golpeados este año por la crisis de deuda de la zona euro, por la conmoción en Oriente Medio, y por la paralización política en Estados Unidos. Eventos similares probablemente aguarden a los inversores en el 2012.

"Las ganancias y los fundamentos estaban ahí para las compañías, pero la crisis política y la parálisis en Washington y en Europa fueron demasiado", dijo Martin Saas, que fundó y dirige al fondo de cobertura M.D. Sass.

"Le pasaron por arriba a los fundamentos. No pensé que la crisis de la zona del euro se fuera a prolongar tanto como lo ha hecho", agregó.

El índice industrial Dow ganó un 5,5% en el año dado que los inversores buscaron la seguridad de las compañías de gran capitalización, con acciones que pagan dividendos.

El Nasdaq perdió un 1,8%.

Los inversores descargaron su ira sobre las acciones del sector financiero, que fue el grupo más débil del año, con una caída de un 18%. Las preocupaciones por la exposición a Europa y la amenaza de una renovada crisis financiera dañaron a esas acciones.

Las acciones de Bank of America Corp fueron las de peor desempeño en el Dow, desplomándose un 58,3% este año, y también estuvieron entre las que registraron las mayores caídas en el S&P 500. Los papeles de JPMorgan Chase & Co se desplomaron un 21,6% en el 2011.

Cabot Oil & Gas Corp en tanto, fue el único componente del S&P que duplico el valor de su acción en el 2011, con un alza del 100,5%, seguido por otra energética, El Paso Corp, cuyo papel subió un 93,1%.

Las acciones más débiles del S&P 500 fueron las de First Solar, dado que las acciones de la compañía se vieron afectadas por la caída en los precios de los paneles solares. En el año, la acción descendió un 74,1%.

Los sectores defensivos, como las empresas de servicios públicos, superaron a los sectores atados al crecimiento, subrayando la idea de que los inversores estaban preocupados por el panorama económico.

Las acciones de McDonald's Corp avanzaron un 31% este año, lo que las convirtió en las que mayor ganancia tuvieron en el Dow.

Reflejando las feroces oscilaciones del mercado, el índice CBOE de volatilidad, o VIX, subió alrededor de un 32% en el año, su primer alza desde el 2008. El S&P 500 trepó un 9% en su punto más alto, y cayó un 14,5% en su punto más bajo.

Un posible resquicio de esperanza para el 2012 es que después de años relativamente planos, el mercado tiende a rebotar.

"Las otras veces que (el S&P 500) no cambió mucho durante el año tuvo un desempeño bastante bueno al año siguiente", dijo Jason Goepfert, presidente de SentimenTrader.com, en un reporte.

"En general, los años posteriores a los años de poco cambio trajeron buenos rendimientos, especialmente en los últimos 50 años", agregó.

El viernes, última sesión de negocios del año, el promedio Dow Jones industrial perdió 69,48 puntos o un 0,57%, y terminó a 12.217,56 unidades.

En tanto, el Standard & Poor's 500 cayó 5,42 puntos o un 0,43%, a 1.257,60 unidades, y el índice Nasdaq Composite perdió 8,59 puntos o un 0,33%, a 2.605,15.

El volumen diario de negocios esta semana ha sido de alrededor de la mitad del promedio por la ausencia de muchos operadores debido a los festivos de Navidad y Año Nuevo. El poco volumen amplifica los movimientos en ambas direcciones .

Las acciones europeas cerraron en alza el viernes pero registraron su mayor pérdida anual en tres años por las tensiones en torno a la deuda soberana en la zona euro, que golpeó al sector financiero y amenazó con hacer naufragar una frágil recuperación económica.