El Fondo Monetario Internacional dio a conocer sus Perspectivas Económicas para el 2014 y 2015, en las cuales se estima que México crecerá 3% y 3,5%, respectivamente.

Excelsior.com.mx. Esta mañana el Fondo Monetario Internacional (FMI) dio a conocer sus Perspectivas Económicas Mundiales (WEO, por sus siglas en inglés) para el 2014 y 2015, en las cuales se estima que México crecerá 3% y 3.5%, respectivamente.

Las cifras no presentaron cambios respecto a la estimación presentada en enero.

El FMI considera que los vientos en contra para la actividad económica se han debilitado, gracias a una política fiscal más acomodaticia y la recuperación en Estados Unidos.

Asimismo, menciona que la inflación se encontrará en el límite superior del objetivo debido a la entrada en vigor de nuevos impuestos. Sin embargo, señala que las expectativas para el largo plazo se mantienen bien ancladas.

Hacia futuro, el FMI dijo que las reformas estructurales, especialmente en el sector de energía y telecomunicaciones, generarán un incremento en el crecimiento potencial de la economía en el mediano plazo.

En cuanto a otras variables, el organismo internacional espera que la inflación termine en 4% este año y 3,5% el próximo. Mientras que el desempleo se ubicará en 4,5% a final del 2014 y 4,3% al cierre del 2015.

Se fortalece recuperación mundial

Pese a reducir el pronóstico de crecimiento mundial en una décima a 3,6% para 2014, el Fondo Monetario Internacional dijo que la actividad económica ha mejorado y se fortalecerá en los próximos dos años, en gran medida apoyada por economías desarrolladas. Sin embargo, señaló que la baja inflación aún apunta a brechas de producto de tamaño considerable.

En tanto, las economías en desarrollo se espera crezcan 4,9% en el año, dos décimas menos que la proyección anterior, impulsadas por las naciones con fuertes relaciones comerciales con las economías desarrolladas.

Adicionalmente, a la baja inflación en economías desarrolladas y un menor desempeño de los países emergentes, el FMI señaló que un nuevo riesgo se ha presentado: tensiones geopolíticas. Sin embargo, considera que el balance de riesgos permanece a la baja.